Entonces
Shariputra con entusiasmo gozoso, se levantó, unió las palmas de sus manos y
fijando sus ojos reverentemente al Honrado por el Mundo le dijo a Buda:
- Ahora, habiendo escuchado este sonido del Dharma del Honrado por el Mundo, mi corazón se regocija y he logrado lo que nunca antes había tenido.
- ¿Cuál es la razón? En el pasado, he oído de Buda un Dharma como éste, y he visto los Bodhisattvas recibir predicciones de Budeidad, pero no tuvimos parte en este asunto. Yo estaba herido profundamente por haber perdido el conocimiento y la visión profunda del Así Venido.
- Honrado por el Mundo, cuando yo vivía en soledad en los bosques de las montañas, ya sea caminando o sentado al pie de los árboles, continuamente estaba pensando: ‘Nosotros todos entramos idénticamente en la naturaleza del Dharma. ¿Por qué el Así Venido nos ha enseñado la liberación a través del Dharma del Vehículo Pequeño?
- ¿Cuál es la razón? Si hemos esperado por la conferencia sobre las causas de alcanzar el Anuttarasamyaksambodhi, debemos ciertamente haber sido liberados a través del Gran Vehículo. Pero no entendimos que ese expediente diestro se había pronunciado de acuerdo a lo que era apropiado. Por lo tanto, cuando primeramente escuchamos el Dharma-del-Buda, inmediatamente después de conocerlo, lo creímos, aceptamos, consideramos y nos certificamos en él.
- Honrado por el Mundo, desde el pasado, día y noche, continuamente me censuré. Ahora, he oído de Buda lo que nunca antes había oído, este Dharma que nunca antes había sido, y todas mis dudas se han terminado. Mi cuerpo y mi mente se han regocijado y estoy en paz.
- Hoy, definitivamente, sé que soy un discípulo verdadero de Buda, nacido de la boca de Buda y transformado por el Dharma; he logrado una participación en el Dharma-del-Buda.
En ese momento Shariputra, deseando reiterar este significado, habló en versos diciendo lo siguiente:
- Oyendo el sonido de este Dharma,
He alcanzado lo que nunca he tenido,
Mi corazón esta rebosante de gozo,
Y la trama de dudas ha sido apartada.
Desde la antigüedad, favorecido con la enseñanza de Buda,
Nunca he perdido el gran vehículo.
El sonido de Buda es extremadamente raro,
Y puede liberar los seres de sus aflicciones.
Ya yo he llegado al final de las filtraciones,
Y ahora al escucharlo mis angustias se disipan.
Mientras habito en los valles montañosos,
Algunas veces al pie de los árboles,
Ya sea sentado o parado,
Constantemente pienso sobre este tópico.
Oh, lloro reprochándome agriamente:
¿Por qué me he auto-engañado?
Nosotros, también somos los discípulos de Buda,
E igualmente entramos en el Dharma de la no-filtración;
Sin embargo en el futuro no seremos capaces
De proclamar el camino insuperable.
El color dorado, las Treinta y Dos,
Los Diez Poderes y todas las liberaciones,
Todas juntas son un solo Dharma,
Pero yo no he alcanzado esas cosas.
Las Ochentas Excelencias Maravillosas,
Los Dieciocho Dharmas Indivisibles,
Esas cualidades de virtudes,
Las he perdido todas y cada una.
Mientras caminaba solo
Veía al Buda en la Gran Asamblea,
Su reputación llenaba las diez direcciones,
Beneficiando extensamente a todos los seres.
Y sentí que había perdido estos beneficios,
Y me había engañado a mí mismo.
Constantemente, día y noche,
Pensé sobre esto,
Y deseé preguntarle al Honrado por el Mundo
Si los había perdido o no.
Observé frecuentemente al Honrado por el Mundo
Alabando a todos los Bodhisattvas,
Y así, día y noche,
Continué deliberando sobre estas cosas.
Ahora oí el sonido de Buda,
Hablando ese Dharma sin filtraciones oportunamente— El cual es difícil de concebir
Y guía a los seres vivientes al Bodhimanda.
Una vez estuve apegado a los puntos de vista desviados,
Fui un maestro de Brahmanes.
Y el Honrado por el Mundo conociendo mi corazón,
Me saco las desviaciones y me enseñó el Nirvana.
Me auto-desprendí de los puntos de vistas desviados,
Me certifiqué en el Dharma del Vacío,
Y entonces me dije
Que había llegado a la extinción.
Pero ahora por fin comprendí
Que eso no era la extinción,
Porque cuando devenga un Buda
Completo con las Treinta y dos Marcar,
Reverenciado por dioses, humanos y Hordas de Yaksha,
Dragones, espíritus y demás,
Solamente entonces seré capaz de decir,
“Esta es la extinción eterna sin residuo”.
El Buda en la Gran Asamblea,
Ha dicho que yo devendré un Buda,
Oyendo ese sonido Dharmático,
Se han dispersado todas mis dudas.
Cuando por primera vez escuché al Buda hablar, Mi corazón se llenó de gran temor.
¿No es éste Mara disfrazado de Buda,
Que viene a perturbarme y confundir mi corazón?
El Buda, a través de diferentes condiciones,
Analogías y discursos ingeniosos,
Hace que el corazón de uno se calme como un mar.
Oyéndolo la malla de mis dudas se desenredó.
El Buda dice que en el pasado
Los Budas ilimitados, ahora extintos,
Habitaban calmadamente en los expedientes,
Y también hablaban este Dharma—cada uno de ellos
En números ilimitados,
Usaban también los expedientes,
Para proclamar el Dharma como éste.
Igualmente ahora el Honrado por el Mundo
Desde el nacimiento hasta que dejó el hogar,
Alcanzó el Camino e hizo girar la Rueda del Dharma,
También habló a través de expedientes.
El Honrado por el Mundo predica el camino verdadero.
El diabólico no hace esas cosas,
Dado que yo ahora sé con toda seguridad
Que éste no es el demonio haciéndose pasar por un Buda.
Porque hube caído en la malla de las dudas,
Dije que éstas eran las acciones de un demonio.
Oyendo la voz con la objeción de Buda,
Profunda, lejana de alcanzar, sutil y fina,
Proclamando ampliamente el Dharma claro y puro,
Grande es el gozo en mi corazón.
Mis dudas se han terminado para siempre,
Dado que estoy parado firme en la sabiduría verdadera.
Tengo la certeza de llegar a ser un Buda,
Reverenciado por dioses y humanos.
Yo haré girar la Rueda Insuperable del Dharma,
Para enseñar y transformar los Bodhisattvas.
En ese momento el Buda le dijo a Shariputra:
- Yo ahora, en el medio de la gran asamblea de dioses, humanos, shramanas, brahmanes y otros, declaro que en el pasado distante, en la presencia de veinte mil millones de Budas, por el beneficio del pasado insuperable, yo te he enseñado y transformado constantemente. Y tú, a través de la noche larga, me has seguido y recibido mi instrucción. Yo he usado expedientes diestros para guiarte a nacer en mi Dharma.
- Shariputra, en el pasado te enseñé a que hicieras la resolución de tomar el Camino de Buda, pero tú lo has olvidado completamente, y por lo tanto te has dicho que ya habías alcanzado la extinción.
- Ahora de nuevo, deseando que recuerdes el camino has practicado de acuerdo a tus votos pasados, yo por el beneficio de los Oyentes Correctos, hablo este Sutra del Gran Vehículo nombrado ‘El Dharma Maravilloso de los Flor de Loto’, un Dharma para instruir a los Bodhisattvas que los Budas protegen y cuidan.
- Shariputra, en la edad futura, después de eones ilimitados e inconcebibles, habiendo hecho ofrendas a algunas miles de miríadas de millones de Budas, habiendo reverenciado y sostenido en alto el Dharma correcto, y habiendo perfeccionado el camino practicado por los Bodhisattvas, tú devendrás un Buda con el nombre de Así Venido Flor de Luz, Valuable de Ofrendas, de Conocimiento Propio y Universal, Uno que su Entendimiento y Conducta es Completa, Uno Bien Ido que Entiende al Mundo, un Señor Insuperable, un Héroe que Domestica y Regula, un Buda, un Honrado por el Mundo.
- Esta tierra se llamará “Aparte de la Inmundicia’. Su suelo será nivelado, puro, adornado, tranquilo, prospero, y abundante de dioses. Su terreno será de lapislázuli y las ocho calles que la interceptan estarán bordeadas de cordones de oro, a través de los cuales estarán situadas líneas de árboles hechos de las siete joyas que constantemente estarán floreciendo y fructificando.
- El Así Venido Flor de Luz, enseñará y transformará también a los seres vivientes a través de los Tres Vehículos. Shariputra, cuando este Buda llegue al mundo, si bien no será en una edad diabólica, por estos votos pasados, él enseñará el Dharma de los Tres Vehículos.
- A ese eón se le llamará ‘Adornado con Grandes Joyas’. ¿Por qué se le llamará as, ‘Adornado con Grandes Joyas’? Porque en esa tierra los Bodhisattvas serán considerados Grandes Joyas.
- Estos Bodhisattvas estarán en números inconcebibles, ilimitados e infinitos, más allá del alcance de las calculaciones o analogías. Con la excepción del poder de la sabiduría de Buda, nada será capaz de conocer su número.
- Cuando ellos deseen caminar, flores enjoyadas surgirán bajo sus pies. Estos Bodhisattvas no serán esos que han hecho surgir sus pensamientos últimamente. Ellos habrán plantado las raíces de virtud por largo tiempo, y en la presencia de ilimitados cientos de miles de miríadas de Budas, han cultivado puramente la conducta de Brahma, constantemente recibiendo la alabanza de Buda. Cultivando continuamente la sabiduría de Buda y completos con las grandes penetraciones espirituales, ellos serán bien versados en todas las puertas del Dharma, con voluntad correcta, ingeniosa y fuerte, tales como esos que llenan esta tierra.
- Shariputra, el tiempo de vida del Luz de Flor será de doce pequeños eones, sin contar el tiempo durante el cual, como un príncipe, él todavía no habrá llegado a ser un Buda. El tiempo de vida de las personas en esa tierra será de ocho pequeños eones.
- Después de doce eones, el Así Venido Luz de Flor le conferirá al Bodhisattva ‘Solidez Completa’ una predicción de Anuttarasamyaksambodhi, y anunciará a los Bhikshus que el Bodhisattva Solidez Completa devendría en breve un Buda con el nombre de ‘Pies Florecidos Caminando Pacíficamente”, Tathagata, arhat, Anuttarasamyaksambodhi. Su tierra de Buda será de un carácter similar.
- Shariputra, cuando el Buda Flor de Luz haya pasado a la extinción, el Dharma verdadero morará en el mundo por treinta y dos pequeños eones. El Dharma parecido morará en el mundo por treinta y dos pequeños eones.
En ese momento, el Honrado por el Mundo, deseando reiterar este significado, habló en versos diciendo:
- Shariputra, en una edad futura,
Habrá un Buda, honrado y completamente sabio,
Con el nombre de Luz de Flor,
Que salvará multitudes ilimitadas.
Habiendo hecho ofrendas a Budas incontables,
Perfeccionado la conducta del Bodhisattva y
Los Diez Poderes y otras cualidades meritorias,
El se certificará en el camino insuperable.
Cuando los eones ¡limitados hayan pasado,
Habrá un eón nombrado “Adornado con Grandes Joyas”.
Y un mundo con el nombre de “Aparte de la Inmundicia”,
Puro y sin filtraciones,
Con lapislázuli como suelo,
Y sus calles bordeadas con cordones dorados,
Con árboles multicolores hechos de las siete joyas,
Que constantemente florecen y fructifican.
Los Bodhisattvas en esa tierra,
Tendrán siempre atención plena,
Con penetraciones espirituales y Paramitas,
Todos perfeccionados completamente
En la presencia de Budas incontables,
Ellos aprenderán muy bien el Camino del Bodhisattva.
Grandes señores como estos
Serán transformados por el Buda Luz de Flor.
Ese Buda, cuando todavía sea príncipe,
Renunciará a su tierra y a su gloria mundana,
Y en su cuerpo final,
Dejará el hogar para alcanzar el Camino del Buda.
El Buda Luz de Flor habitará en el mundo
Por un espacio de tiempo de doce pequeños eones.
Las personas de su tierra
Vivirán por ocho pequeños eones.
Cuando ese Buda se haya extinguido,
El Dharma correcto permanecerá en el mundo
Por treinta y dos pequeños eones,
Predicándose extensamente a los seres vivientes.
El Dharma semejante permanecerá por treinta y dos.
Las sariras se distribuirán extensamente,
Para los ofrecimientos de dioses y humanos.
Las acciones del Buda Luz de Flor,
Deben ser así.
Ese honrado sabio, doblemente perfecto,
Será supremo y más allá de comparación.
¡Y simplemente eres tú mismo!
Así que es correcto y apropiado que te regocijes.
En ese momento, la asamblea cuádruple de Bhikshus, Bhikshunis, Upasakas, Upasikas, tanto como la gran multitud de Yakshas, Gandharvas, Asuras, Garudas, Kinnaras, Mahoragas, y así sucesivamente, viendo a Shariputra, en la presencia del Buda recibiendo una predicción para el Anuttarasamyaksambodhi, se regocijaron grandemente en sus corazones y saltaron de abundante gozo.
Cada uno removió la parte superior de su vestimenta y se la presentó como ofrenda al Buda. Shakro Devanam Indrah y el rey Celestial Brahma, junto con incontables dioses, también les hicieron ofrecimientos al Buda de maravillosas vestimentas celestiales, flores celestiales Mandaravas y Mahamandaravas, y así sucesivamente.
Las vestimentas celestiales que ellos tiraron al aire permanecieron en el espacio vacío circumambulando alrededor. Entonces repentinamente al mismo tiempo, en el espacio vacío, cientos de miles de miríadas de clases de músicas celestes comenzaron a sonar, y cayó una lluvia de flores celestiales.
Al mismo tiempo ellos pronunciaban estas palabras: “Hace mucho
tiempo, en Varanashi, el Buda primeramente hizo girar la rueda del
Dharma. Ahora, él hace girar de otra vez la insuperable y magnificente
Rueda del Dharma”.
En ese momento todos los dioses, deseando reiterar este significado, hablaron en verso diciendo:
- Hace mucho tiempo en Varanashi,
Tú hiciste girar la Rueda del Dharma de las Cuatro Nobles Verdades,
Discriminando y discerniendo los Dharmas,
La producción y la extinción de los Cinco Acumulaciones.
Ahora de nuevo has hecho girar la maravillosa
E insuperable gran rueda del Dharma,
Lo recóndito y profundo de este Dharma,
Y sólo unos cuantos son los que pueden creerlo.
Nosotros, desde hace mucho tiempo,
Hemos frecuentemente hemos oído hablar al Honrado por el Mundo,
Pero nunca habíamos oído ese Dharma,
Tan profundo, maravilloso y supremo.
El Honrado por el Mundo ha predicado el Dharma,
Y nosotros nos regocijamos en acuerdo;
Ahora, que el gran sabio Shariputra
Recibe la predicción del Honrado por el Mundo;
Nosotros también somos como esto,
Y seguramente devendremos Budas[11],
Y a través de todos los mundos,
Seremos honrados y supremos.
El Camino de Buda es inconcebible,
Enseñando diestramente de acuerdo a lo apropiado.
Que todo nuestras bendiciones karmáticas,
Es esta vida y en las pasadas,
Y los méritos y virtudes ganados de ver a los Budas,
Se dediquen al Camino del Buda.
En ese momento, Shariputra le habló al Buda diciendo:
- Honrado por el Mundo, habiendo recibido de Buda una predicción para el Anuttarasamyaksambodhi, ahora ya no tengo más dudas o vacilaciones. Pero los mil doscientos cuyos corazones han alcanzado el dominio propio, y que previamente han habitado en el estado de estudio, y eran enseñados constantemente por el Buda que dijo: “Mi Dharma puede capacitarle a uno el separarse del nacimiento, la vejez, la enfermedad y la muerte, y han logrado el Nirvana Ultimo”; esos que estudian y aquellos más allá del estudio que igualmente se han separado del punto de vista del ‘yo’, los puntos de vista de la existencia y la no-existencia, y así sucesivamente, y claman que ellos han alcanzado el Nirvana; ellos no obstante, oyendo del Honrado por el Mundo eso que nunca han oído antes, han caído en las dudas y el engaño. Definitivamente Bondadoso y Honrado por el Mundo, te suplicamos que por el beneficio de la asamblea cuádruple, hables de esas causas y condiciones, para liberarlos de sus dudas y vacilaciones.
En ese momento el Buda le dijo a Shariputra:
- ¿No he dicho antes que todos los Budas, Honrados por el Mundo, hablan el Dharma a través de varias causas y condiciones, parábolas, frases, y expedientes diestros, todo por el beneficio del Anuttarasamyaksambodhi? Todas estas enseñanzas son para el beneficio de la transformación de los Bodhisattvas. Sin embargo, Shariputra, ahora de nuevo usaré una parábola para adicionalmente clarificar el principio, para que todos aquellos que son sabios expandan el entendimiento a través de alegorías.
- Shariputra, suponte que en un país, una ciudad o una villa, hay un gran anciano, con muchos años de vida, de salud perfecta, y riquezas ilimitadas. El posee haciendas, casas y sirvientes.
- Su casa es espaciosa y grande, teniendo sólo una puerta y viviendo en ella una gran cantidad de personas, cien, doscientos, incluso quinientas personas.
- Sus pasillos y habitaciones estaban deteriorados y viejos, y sus paredes cayéndose. Los pilares estaban corroídos en sus bases y sus vigas y columnas se estaban peligrosamente colapsando.
- Entonces al momento, a través de la casa, surge un fuego que se extiende por toda ella.
- Los hijos del anciano, diez, veinte, incluso treinta de ellos, se encuentran dentro de la casa.
- El anciano, mirando el fuego que ha surgido de los cuatro lados de la casa, se alarma enormemente y reflexiona: “Aunque he escapado salvo a través de la puerta en llamas, todos mis hijos permanecen dentro de la casa que se está quemando, apegados felizmente a sus placeres, inconscientes, sin saber, sin alarmarse y sin temer. El fuego se está apoderando de ellos y se quemarán con dolor, pero en el fondo a ellos no les importa, ni tienen ningún pensamiento de escapar”.
- Shariputra, el anciano entonces reflexiona de nuevo: “Tengo cuerpo y brazos fuertes. Así que los puedo sacar de la casa en un saco o sobre una carretilla’. El anciano continúa reflexionando: “Esta casa tiene solamente una puerta y es estrecha y pequeña. Mis hijos son jóvenes e inmaduros y todavía no saben nada. Apegados a su sitio de juegos, ellos pueden caer y quemarse en el fuego. Debo decirles de este asunto tan atemorizante, que la casa ha cogido fuego y ellos deben apurarse en salir para no quemarse”. Así pensando, él le habla a sus hijos, diciendo: “iRápido, salgan de la casa todos ustedes!” Aunque el padre en su compasión los induce con buenas palabras, todavía los hijos están apegados a sus placeres y juegos y rehúsan creerle. Ellos no tienen miedo ni temor, ni la menor intención de irse. Lo que es más, ellos no saben lo que quiere decir ‘fuego’, o ‘casa’, o lo que significa ‘estar perdido’. Ellos meramente corrían por toda la casa, de este a oeste, porque estaban jugando, y mirando a su padre.
- Entonces el anciano pensó: “La casa está en llamas en medio de un gran fuego. Si mis hijos no salen a tiempo, seguro que se quemarán. Ahora inventaré un expediente o recurso hábil para que mis hijos puedan evitar este desastre.
- El padre, conociendo las predisposiciones de sus hijos y las preferencias que cada uno tenía por sus diferentes juguetes y sus distintos juegos a los cuales ellos respondían felizmente, les habló diciéndoles: “Las cosas con que a ustedes les gustaría jugar, son raras y difíciles de obtener. Si ustedes no las recogen, seguramente después se arrepentirán. Objetos como esos: ‘una variedad de carritos y carretillas de cabras, ciervos y bueyes, están ahora fuera de la puerta de la casa esperando que ustedes jueguen con ellos. Todos ustedes deben salir rápidamente de esta casa en llamas y les daré lo que deseen.
- Entonces los muchachos, oyendo a su padre hablar de esos juguetes preciosos que colmaban exactamente sus expectaciones y deseos, entusiasmadamente se empujaron unos a los otros hacia fuera de la casa en una carrera loca, todos peleando para salir de la casa en llamas.
- En ese momento, el anciano, viendo que sus hijos habían salido de la casa, sanos y salvos, y estaban sentado en la calle en la acera de enfrente, sin ningún otra obstrucción, se sintió en paz y lleno de felicidad.
- Entonces los hijos todos le dijeron a su padre: “Por favor, padre, danos los juguetes hermosos que nos prometiste hace un rato, las carretillas de las cabras, ciervos y bueyes.
- Oh, Shariputra, en ese momento el anciano le dio a todos sus hijos igualmente un gran carruaje.
- Un carruaje alto y ancho, adornado con una multitud de joyas entrelazadas, rodeado de balaustres y con campanas colgando en sus cuatro esquinas. Además, estaba cubierto con toldos adornados con joyas raras y diferentes, ensartado con cordones enjoyados y adornado con flores colgantes. El carruaje estaba forrado con alfombras hermosas y almohadas de rosas. Se acoplaba o unía a una
pareja de bueyes, uno blando y el otro morado de una apariencia excelente y de una gran fuerza muscular, que caminaban con un trote
calmado, volando como el viento; teniendo también muchos sirvientes que los seguían y cuidaban.
- ¿Y por qué es esto? Ese gran anciano tenía riquezas ilimitadas y toda clase de almacenes llenos hasta el borde.
- Así que él reflexionó nuevamente: “Mis posesiones son ilimitadas, así que no debo darle a mis hijos unos carros inferiores o pequeños. Todos esos jovencitos son mis hijos, a los que amo sin parcialidad.” Habiendo mandado a hacer esos carruajes con las siete joyas, infinitas en número, debe de dárselos igualmente a cada uno. ¿Por qué? Porque aunque los repartiera entre todos los habitantes del país completo, aun sobraría, ¡Cuánto menos sería si se los doy solamente a ellos!
- Mientras tanto, todos los muchachos estaban montando sus carruajes por los alrededores, habiendo obtenido lo que nunca habían esperado, más allá de sus deseos originales.
- Shariputra, ¿qué piensas? Cuando el anciano les da igualmente a
todos sus hijos los carruajes enjoyados, ¿es él culpable de falsedad o
no?
Shariputra respondió:
- No, Honrado por el Mundo. El anciano no es culpable de falsedad, porque solamente les ha capacitado a sus hijos el evitar la calamidad del fuego, y les ha salvado sus vidas. ¿Por qué es esto? Al salvar sus vidas él le ha dado ya un algo muy bueno. ¿Cuánto más no será en preparar los expedientes para salvarlos de la casa en llama?
- Honrado por el Mundo, si ese anciano inclusive no les hubiera dado ni un solo carrito, él todavía no habría hablado falsedad. Porque el anciano previamente tuvo el siguiente pensamiento: “Usaré expedientes para guiarlos a salir de la casa”. Por esa razón él no es culpable de falsedad. Incluso él es mucho menos culpable, sabiendo que su propia riqueza es ilimitada y deseando beneficiar a todos sus hijos, él les da igualmente a todos un gran carruaje.
El Buda le dijo a Shariputra:
- ¡Definitivamente bien, definitivamente bien! Es así como lo has dicho.
- Shariputra, el Así Venido es también así; es el padre de todos en el mundo. El ha terminado para siempre todos los temores, las debilidades, las preocupaciones, la ignorancia y la oscuridad. Ha alcanzado completamente el conocimiento, la visión, la valentía y los poderes ilimitados. El tiene la gran fortaleza espiritual y el poder de la sabiduría. Ha perfeccionado los Paramitas de los Expedientes y de la sabiduría. El es grandemente gentil y compasivo. Nunca se cansa, siempre buscando el bien para beneficiar a todos. Y consecuentemente él ha nacido en los Tres Dominios que son como la casa en llamas; para salvar a los seres vivientes del fuego del nacimiento, la vejez, la
enfermedad, la muerte, el sufrimiento, la miseria, la estupidez, el embotamiento y en los Tres Venenos. El los enseña y transforma, guiándolos al logro del Anuttarasamyaksambodhi.
- Él ve que todos los seres vivientes están consumidos por el nacimiento, la vejez, la enfermedad, la muerte, el sufrimiento y la miseria. Ellos pasan a través de variados sufrimientos de los Cinco Deseos, la riqueza y la ganancia. Además, por sus apegos y avaricia, ellos, en el presente, pasan a través de una gran cantidad de sufrimiento y en el futuro irán a sufrir en los infiernos, entre los animales, o los fantasmas hambrientos. Si nacen en los cielos o entre los seres humanos, ellos sufrirán la pobreza y la angustia, el sufrimiento de estar separado de los seres queridos, el sufrimiento de estar unido a lo que odia, y todos los diferentes sufrimientos como los anteriores. A pesar de eso, los seres vivientes se hunden en este caos, banales, inconscientes, ignorantes, despreocupados y sin ningún temor. Ellos nunca se satisfacen ni buscan la liberación. En la casa en llamas de los Tres Dominios ellos corren de un lugar a otro, del este al oeste. Y aunque se tropiezan con sufrimientos enormes, a ellos no les importa.
- Shariputra, habiendo visto esto, el Buda además piensa: “Yo soy el padre de los seres vivientes. Debo rescatarlos de este sufrimiento y dificultades, y les doy la bienaventuranza infinita e ilimitada de la sabiduría de Buda para que participen en ella.
- Shariputra, el Así Venido además piensa: “Si meramente uso el poder espiritual y el de la sabiduría, y aparto los expedientes, alabando, para todos los seres vivientes, el poder del conocimiento, de la visión, los poderes y la valentía del Así Venido, los seres vivientes no serán capaces de salvarse de esta forma. ¿Por qué es esto? Todos estos seres vivientes todavía no han escapado del nacimiento, la vejez, la enfermedad, la muerte, el sufrimiento y la miseria. Ellos son seres que se consumen en la casa en llamas de los Tres Dominios. ¿Cómo pueden ellos entender la sabiduría del Buda?
- Shariputra, al igual que ese gran anciano, que aunque tenía un cuerpo y unos brazos poderosos no los usó para rescatar a sus hijos sino que aplicó diestramente expedientes y recursos para salvarlos y después les dio un gran carruaje adornado con joyas preciosas; en esa misma forma, el Así Venido, aunque posee poderes e intrepidez, no los usa.
- Él meramente usa la sabiduría y los expedientes para rescatar a los seres vivientes en la casa en llama de los Tres Dominios, hablándoles de los Tres Vehículos; el de los Oyentes Rectos, el de los Pratyeka Buddha y el del Vehículo de Buda.
- Y él Así Venido le dice a ellos: ‘Todos ustedes no deben sentir placer viviendo en la casa en llama de los Tres Dominios. No deseen las formas, los sonidos, los olores, los gustos y los objetos tangibles vulgares y malévolos. Si se apegan a ellos egoístamente y hacen que surja el amor por ellos, ustedes se quemarán. Deben escapar rápidamente de los Tres Dominios y obtener los Tres Vehículos; el de los Oyentes Rectos, el de los Pratyeka Buddha y el del Vehículo de Buda. Al presente les doy mi garantía para esto y eso nunca podrá ser una falsedad. Ustedes sólo necesitan practicar diligente y energéticamente. El Así Venido usando estos medios y recursos diestros guía a todas las criaturas.
Además él dice: “Todos ustedes deben saber que los Dharmas de los Tres Vehículos han sido alabados por los sabios. Ellos harán que sean libres, emancipados e independientes. Montando sobre estos Tres Vehículos, por medio de las raíces de las no-filtraciones, los poderes, las iluminaciones, los caminos, los Dianas, las concentraciones, las liberaciones, los Samadhis y así sucesivamente, ustedes se entretendrán y alcanzaran la paz y la felicidad”.
- Shariputra, si hay seres vivientes que poseen interiormente la naturaleza-sabia, y escuchan el Dharma del Buda - el Honrado por el Mundo - creyéndolo y aceptándolo, y diligentemente progresando, deseando rápidamente escapar de los Tres Dominios y buscando el Nirvana para sí, ellos se llaman los del Vehículo del Oyente Recto. Ellos son como los hijos que buscaron la carretilla de las ovejas y así escapan de la casa en llama.
- Si hay seres vivientes que oyendo el Dharma de Buda — el Honrado por el Mundo — lo creen y aceptan, diligentemente progresando y buscando por sí mismos la sabiduría espontánea, deleitándose en la soledad y amando la calma, entendiendo profundamente las condiciones causales de todos los Dharmas, ellos se llaman los del Vehículo de los Pratyeka Budas. Ellos son como los hijos que buscaron por la carretilla de los ciervos y así escaparon de la casa en llama.
- Si hay seres vivientes que oyendo el Dharma de Buda — el Honrado por el Mundo — lo creen y aceptan, practicando honestamente con energía, buscando toda la sabiduría, la sabiduría no-enseñada, el conocimiento y la visión del Así Venido, sus poderes y valentía, compadeciéndose y confortando a los infinitos seres vivientes, beneficiando a los dioses y humanos, salvándolos a todos, a ellos se les llaman los del Gran Vehículo. Porque los Bodhisattvas buscan este vehículo, a ellos se les llama Mahasattvas. Ellos son como los hijos que buscaron la carretilla de bueyes y así escaparon de la casa en llama.
- Shariputra, al igual que el gran anciano, viendo que todos sus hijos habían escapado sanos y salvos de la casa en llamas a un lugar seguro, y considerando su propia riqueza ilimitada, le da a todos ellos un gran carruaje, así el Así Venido, en la misma forma, es el padre de todos los seres vivientes. Cuando él ve los millones ilimitados de seres vivientes usando el portón de salida de las enseñanzas de Buda para liberarse del temor y los caminos peligrosos del sufrimiento de los Tres Dominios y lograr la bienaventuranza del Nirvana, él piensa: “Tengo sabiduría ilimitada e infinita, poderes, valentía y así sucesivamente—el almacén completo del Buddhadharma. Todos esos seres vivientes son mis hijos. Debo darles a todos ellos un gran carruaje, no dejando que alcancen la extinción individual, sino cruzándolos hacia la extinción a través de la extinción del Así Venido. Habiendo escapado de los Tres Dominios, a todos esos seres vivientes se les da como entretenimiento las concentraciones Dhyana de Buda, las liberaciones y así sucesivamente, todas de una sola marca y una sola clase, alabada por los sabios y fructífera de la bienaventuranza principal, pura y maravillosa.
- Shariputra, al igual que primeramente el gran anciano usó las tres carretas para atraer a sus hijos y entonces más adelante les dio un gran carruaje adornado con joyas y supremamente cómodo, no es culpable de falsedad. Justo así, el Así Venido, similarmente no culpable de falsedad al hablar primeramente de los Tres Vehículos para atraer a los seres vivientes y entonces después liberarlos sólo a través del Gran Vehículo. ¿Cuál es la razón? El Así Venido tiene sabiduría ilimitada, poderes y valentía, un almacén de Dharmas, y es capaz de darles a todos los seres vivientes el Dharma del Gran Vehículo. Sin embargo, no todos los seres vivientes son capaces de aceptarlo. Shariputra, por estas causas y condiciones debes saber que los Budas, usando el poder de los expedientes diestros, en el Unico Vehículo de Buda, discriminan y hablan de tres.
El Buda, deseando reiterar este significado, habló en versos diciendo:
- Supongamos que hay un gran anciano
Muy viejo y acaudalado,
Que tiene una gran mansión
Que se está colapsando.
Los pasillos son altos y están en malas condiciones,
Los pilares están corroídos en sus bases,
Las vigas y las columnas inclinadas,
Los cimientos y las escaleras se están derrumbando.
Las paredes exteriores e interiores están en ruinas,
Y el yeso de los emplastes de las paredes descascarando y
desprendiendo.
La techumbre se está cayendo de todas formas,
Y las vigas y aleros se están desprendiendo.
Las paredes interiores de toda la casa se están doblando,
Y están cubiertas de toda clase de suciedad.
En la casa había quinientas personas viviendo en ella.
Había lechuzas, halcones, y buitres,
Cuervos, palomas, urracas, cotorras,
Serpientes negras, víboras y escorpiones,
Ciempiés, y milpiés.
Había lagartijas, y miriápodos,
Comadrejas, tejones y ratones—
Toda clase de criaturas malignas
Corriendo por la casa de arriba abajo.
Había lugares apestados con excrementos y orina,
Manando en inmundicia,
Con excrementos de cucarachas
Amontonados sobre ellas.
Había lobos, zorros y chacales
Que se comían y devoraban cadáveres,
Esparciendo la carne y los huesos.
Entonces manadas de perros
Hambrientos, débiles y aterrorizados,
Llegaban corriendo para cogerlos,
Peleando y escarbando,
Aullando, gruñendo y ladrando.
El terror y el espectáculo en esa casa
Eran de esa forma.
Li Mei y Wang Liang[12]
Estaban en todas partes.
Los Yakshas y los fantasmas diabólicos
Estaban comiendo carne humana.
Había criaturas venenosas de todas clases,
Y aves y bestias diabólicas,
Dando a luz sus pimpollos,
Cada uno protegiendo los suyos.
Yakshas compitiendo por los retoños.
Y peleándose unos con los otros para comérselos.
Habiendo comido sus excrementos,
Sus pensamientos diabólicos
Se inflamaron más.
El sonido de sus reyertas,
Era terrible hasta el extremo.
Los fantasmas Kumbhandas
Se arrastraban sobre terrones de tierra
O algunas veces saltaban un pie o dos del suelo,
Mientras vagaban de un lugar a otro
Divirtiéndose en la forma que deseaban,
Agarrando perros por dos patas,
Y golpeándolos de forma que perdieran sus ladridos;
Torciéndoles las piernas alrededor del cuello,
Atemorizándolos para su propio placer.
Además había fantasmas
Con cuerpos muy altos y largos,
Desnudos, ennegrecidos y delgados,
Siempre viviendo dentro,
Y emitiendo sonidos estridentes y diabólicos,
Aullando en busca de comida.
También había fantasmas
Con gargantas como agujas;
Y otros con cabezas de bueyes
Que en ese momento comían carne humana
Y estaba devorándose los perros.
Estaban desgreñados
Y eran dañinos y crueles,
Oprimidos por el hambre y la sed
Ellos corrían por todas partes gritando y aullando.
Había Yakshas, fantasmas hambrientos,
Y toda clase de aves y bestias diabólicas,
Frenéticas con hambre, frente a las cuatro direcciones,
Atisbando a través de las ventanas.
Esos eran allí los problemas
Y los terrores más allá de toda medida.
Esta casa vieja y decadente
Pertenecía a un hombre
Que había salido de ella y estaba a una corta distancia,
Cuando al poco tiempo,
Las habitaciones traseras de ella
Cogieron fuego.
En un momento, todos los cuatro lados de la casa
Estaban rodeados de llamas intensas e incontrolables.
Las vigas, las columnas, los aleros y los cimientos
Temblaron y se abrieron con el sonido de una explosión,
Fragmentándose y cayendo,
A medida que las paredes interiores y exteriores, se desintegraban y
se desplomaban.
Todos los fantasmas y espíritus
Gritaban ruidosamente,
Mientras los halcones, buitres y otras aves,
Los Kumbhandas, y así sucesivamente,
Corrían de un lugar a otro en pánico,
Incapaces de salir de la casa por ellos mismos.
Bestias diabólicas e insectos venenosos
Se escondían en los huecos y en las rendijas,
Mientras los fantasmas Pishachas
También habitaban allí.
Con bendiciones y virtudes insuficientes,
Ellos estaban atrapados por el fuego;
Bebiendo sangre y comiendo carne
Y dañándose los unos a los otros.
Viendo que las hordas de Yeh Kan[13]
Ya estaban muertas,
Bestias diabólicas monstruosas
Competían para devorarlos,
Mientras vapores de humo hediondo
Penetraba todos los cuatro lados.
Ciempiés y milpiés
Y muchas clases variadas de serpientes venenosas
Peleando para escapar de sus escondrijos,
Se quemaban por el fuego.
Los fantasmas Kumbhandas
Los agarraban y se los comían.
Además, todos los fantasmas hambrientos,
Con las puntas de sus cabezas en llamas,
Atormentados por el hambre, la sed y el calor,
Corrían aterrorizados y angustiados.
Eso es lo que pasaba en esa casa:
Aterrorizados al extremo,
En peligro y conflagración—
No sólo con un problema, sino con una multitud ellos.
En ese momento el dueño de la casa
Estando parado afuera de la puerta
Escuchó a alguien decir:
“Todos ustedes muchachos
Hace un momento, jugando,
Entraron en esta casa.
Siendo jóvenes e ignorante,
Ellos se deleitaban en jugar y estaban apegados a sus diversiones”.
Habiendo oído esto, el anciano
Entró alarmado en la casa en llamas.
Tratando de salvarlos
De carbonizarse,
El les avisó
Acerca de la multitud de desastres:
“Los fantasmas diabólicos, los insectos venenosos
Y los combates que se estaban extendiendo,
La multitud de sufrimientos en sucesión
Que eran continuos y sin interrupción.
Las serpientes venenosas y las víboras
Y todos los Yakshas,
Los fantasmas Kumbhandas,
Los chacales y sus similares, los lobos, los zorros y los perros,
Los gavilanes, las águilas, los buitres, y las lechuzas,
Y las variedades de los ciempiés
Estaban frenéticos y aterrorizados hasta el extremo
Por el hambre y la sed.
¡Había muchos sufrimientos y problemas,
Incrementados enormemente por este gran fuego!
Pero todos los hijos, sin conocimiento, ignorantes,
Aunque habían oído los avisos de su padre,
Todavía se aferraban a sus entretenimientos
Y se divertían sin cesar.
En ese momento, el anciano
Pensó adicionalmente:
“Siendo así, mis hijos
Han añadido a mis preocupaciones más sufrimiento,
Ahora, en esta casa, no hay
Una sola cosa en la que podemos ser felices,
Y sin embargo, todos estos muchachos
Están intoxicados con sus juegos.
Por no prestarle atención a mis instrucciones,
Ellos se van a carbonizar en el fuego”.
En ese momento él pensó
En ingeniar algunos expedientes.
Él les dijo a sus hijos:
“Tengo toda clase
De juguetes preciosos:
Finos carruajes, enjoyados y maravillosos,
Carretillas de cabras, de ciervos y bueyes,
Que están ahora afuera de la puerta de la casa.
Así que, salgan todos
Porque tengo para ustedes
Esos carruajes y carretillas
Fabricadas a vuestro gusto
Para que puedan jugar con ellos”.
Cuando los muchachos escucharon lo que él estaba hablando
Acerca de los carros como esos,
Ellos inmediatamente corrieron agitadamente hacia fuera
A un lugar seguro
Donde estuvieron a salvo de ser quemados por el fuego.
El anciano, viendo que sus hijos
Habían escapado de la casa en llamas,
Y estaban parados al otro lado de la calle,
Se sentó en su trono de león
Y habiéndose regocijado dijo:
“iAhora estoy feliz!
Fue muy difícil traer al mundo
A esos muchachos y hacerlos crecer;
Necios, jóvenes y sin conocimiento,
Ellos entraron en esta peligrosa casa
Ardiente por los cuatro costados,
Colmada de insectos venenosos
Y temibles fantasmas Li y Mei,[14]
Pero todos ellos
Todavía se aferran a sus diversiones.
Ahora tengo que rescatarlos
Y salvarlos del desastre.
Por lo tanto, de todas las personas,
¡Yo soy el más feliz!
Entonces, todos los hijos,
Sabiendo que su padre estaba sentado felizmente,
Se dirigieron a él y le dijeron:
“Por favor, danos los tres carros enjoyados
Que nos has prometido cuando dijiste,
Que si tus hijos salían de la casa
Les darías tres carros
Como los que ellos querían.
Ahora el momento ha llegado,
¡Por favor, dánoslos!”
El anciano, teniendo una gran fortuna
Y almacenes conteniendo mucho
Oro, plata y lapislázuli,
Madre perlas y rubíes,
Usó estas cosas preciosas
Para fabricar varios carruajes magnificentes.
Ellos estaban adornados y decorados,
Rodeados de balaustres,
Con cordones dorados entrelazados en ellos,
Mallas con mostacillas de gemas
Esparcidas sobre ellos,
Y campanas colgantes en los cuatro lados.
Los carruajes tenían borlas de flores doradas
Colgando en todas partes,
Y ornamentos multicolores variados
Que los rodeaban.
Los cojines y las fundas blancas y pulcras,
Que estaban hechos de seda suave y algodón,
Y valorados en los miles de millones,
Estaban esparcidos arriba de los asientos.
Un gran buey blanco,
Regordete, fuerte y poderoso,
De apariencia fina,
Estaba enyugado a los carros preciosos.
Estos estaban rodeados por muchos hombres que iban a pie
Y que los servían y acompañaban.
Tales carruajes se les dieron igualmente
A todos los hijos.
Entonces todos los muchachos
Danzaron de felicidad;
Se montaron en los carros enjoyados
Y viajaron en las cuatro direcciones,
Divirtiéndose felizmente ellos mismos
En una comodidad sin obstrucciones.
Shariputra, te dijo
Que yo soy también así,
El honrado entre los muchos sabios,
El padre de los mundos.
Todos los seres vivientes
Son mis hijos,
Ellos, profundamente apegados a los placeres mundanos,
No tienen en absoluto, pensamientos inteligentes y prudentes.
En los Tres Dominios no hay paz;
Ellos son como una casa en llamas.
Llenos de muchos sufrimientos,
Y definitivamente temerosos.
Siempre presentes están las aflicciones
Del nacimiento, la vejez, la enfermedad y la muerte;
Fuegos como esos
Arden sin cesar.
El Así Venido ya ha dejado atrás
La casa de los Tres Dominios.
Calmadamente habito en quietud,
Y en paz en los bosques y los campos.
Y ahora es que los Tres Dominios
Me pertenecen enteramente,
Y en ellos todos los seres vivientes
Son mis hijos.
Sin embargo, ahora este lugar
Está lleno de calamidades,
Y yo soy el único
Capaz de rescatarlos.
Aunque los instruyo,
Ellos no creen o aceptan,
Por su profundo apego y egoísmo
A todos los deseos corruptos.
Usando los expedientes,
Les hablo de los Tres Vehículos,
Causándoles a todos los seres vivientes
Que entiendan el dolor de los Tres Dominios.
Revelo y proclamo extensamente
El camino que trasciende el mundo.
Todos estos hijos,
Si fijan sus mentes,
Pueden perfeccionar las Tres Claridades
Y los Seis Poderes Espirituales.
Algunos devendrán Iluminados-Condicionados, Y otros Bodhisattvas irreversibles.
- Shariputra,
Yo hablo esta parábola
Para los seres vivientes
Del Unico Vehículo.
Si todos ustedes son capaces
De creer y aceptar estas palabras,
En el futuro alcanzaran
El camino de Buda.
Este vehículo es sutil y maravilloso,
Puro y primordial.
En todos los mundos
Es el más supremo.
Los Budas se regocijan en él,
Y todos los seres vivientes
También deben alabarlo
Hacer ofrendas y reverénciense ante él.
Miles de millones ilimitados
De poderes y liberaciones,
Samadhis Dhyana y sabiduría
Y los otros Dharmas de los Budas
Se obtienen en un vehículo como este.
Yo causo que todos mis hijos,
Noche y día por muchos eones,
Por siempre se mantengan interesados
En montar este precioso vehículo
Que los lleva directamente al Camino,
En la compañía de los Bodhisattvas
Y la congregación de los Oyentes Correctos.
Por esas razones,
Aunque ellos busquen en las diez direcciones,
No hay otro vehículo,
Excepto los expedientes de los Budas.
Shariputra, te digo
Que todos ustedes
Son mis hijos,
Y yo soy vuestro padre.
Por muchos eones, ustedes
Se han quemado por muchas miserias,
Y yo les he salvado a todos,
Guiándolos fuera de los Tres Dominios.
Aunque más temprano dije
Que ustedes han pasado a la extinción,
Era sólo un final para el nacimiento y la muerte
Y no la extinción verdadera.
Lo que ahora deben alcanzar
Es nada más que la sabiduría de los Budas.
Si hay Bodhisattvas
En esta asamblea,
Ellos pueden, con una sola mente en atención plena, escuchar
El Dharma real y verdadero de Buda.
Aunque los Budas, los Honrados por el Mundo,
Emplean expedientes diestros,
Los seres vivientes que ellos transforman
Son todos Bodhisattvas.
Si hay algunos de poca sabiduría,
Apegados profundamente al amor y al deseo,
Por su beneficio
Les enseño la Verdad del Sufrimiento.
Entonces los seres vivientes se regocijan
Ganando lo que nunca han tenido antes,
Porque la enseñanza de Buda de la Verdad del Sufrimiento
Es verdadera, real y no es falsa.
Si hay seres vivientes
Que no conocen el origen del sufrimiento,
Que están apegados profundamente a la causa del sufrimiento,
Incapaces de dejarla incluso por un momento,
Por sus beneficios
Yo hablo apropiadamente del camino.
La causa de todo sufrimiento
Está enraizada en el deseo.
Si uno extingue el egoísmo y el deseo,
El sufrimiento no tiene donde descansar.
A la extinción de todo sufrimiento
Se le llama la Tercera Verdad.
Por el beneficio de la verdad de la extinción,
Uno cultiva el camino;
El dejar todas las conexiones de los sufrimientos
Se le llama ‘el logro de la liberación’.
¿De qué esas personas han sido liberadas?
A esa elemental separación de lo falso
Se le llama liberación.
En realidad ellos todavía
No han obtenido la liberación total.
El Buda dice que esas personas
No han alcanzado todavía verdaderamente la extinción,
Porque ellos todavía no han llegado
Al camino insuperable.
No es mi deseo
Guiarlos a la extinción[15].
Yo soy el rey del Dharma,
En armonía con todos los Dharmas.
Me manifiesto en este mundo
Para traerle paz y tranquilidad a los seres vivientes.
iShariputra!
Este sello mío del Dharma
Se habla, porque deseo
Beneficiar al mundo.
Por dondequiera que vayas,
No lo trasmitas incorrectamente.
Si hay quien lo oiga
Y se regocije en él, recibiéndolo
Encima de sus coronillas,
Debes saber que tales personas
Son Avaivartika[16].
Aquellos que creen y aceptan
El Dharma de este Sutra,
Esas personas ya han visto
Los Budas del pasado,
Les han hecho ofrendas reverentemente,
Y también han oído este Dharma.
Esos que son capaces
De creer lo que dices,
Ellos entonces me ven,
Y te ven también a ti,
Además ven la Bhikshusangha,
Como igualmente a todos los Bodhisattvas.
Este Sutra del Dharma de la flor
Se predica para esos de sabiduría profunda;
Cuando esos de entendimiento poco profundo lo oyen,
Confundidos y engañados, fracasan en entenderlo.
Todos los Oyentes Rectos
Y los Pratyeka Budas,
Encuentran los contenidos en este Sutra
Más allá de sus poderes.
Shariputra, tú has ganado
La entrada a este Sutra
A través de la fe.
Cuánto más podrían haberla ganado los otros Oyentes Rectos.
Esos Oyentes Rectos
Por su fe en las palabras de Buda,
Obedecen este Sutra
Pero el significado está más allá del alcance de su propia sabiduría.
Además, Shariputra,
Para el arrogante e indolente
Y para aquellos que consideran el punto de vista del ‘yo’,
No prediques este Sutra.
Las personas ordinarias de entendimiento poco profundo,
Arraigadas en extremo a los Cinco Deseos,
Al oírlo, fracasarán en entenderlo;
Tampoco se lo hables a ellos.
Si hay esos que no creen,
Y que difaman este Sutra,
Ellos haciendo esto, se separarán
De todas las semillas de la experiencia de Buda.
O si con insolencia,
Ellos abrigan las dudas y los engaños,
Tú debes escuchar ahora,
Lo que hablo de las retribuciones de sus ofensas:
Ya sea un Buda que está en el mundo,
O uno que ha entrado en extinción;
Si hay esos que disfaman
Un Sutra como éste,
Que viendo a otros leerlo o recitarlo,
Copiarlo o sostenerlo en alto,
Los ridiculizan, desprecian, odian y envidian,
Y abrigan resentimientos en contra de ellos,
En cuando a la retribución de su ofensa,
Escucha esto de nuevo ahora:
Esas personas al final de sus vidas
Entraran en el infierno de Avichi
Por un eón completo.
Cuando ese eón finalice, nacerán allí de nuevo,
En esa forma ellos rotaran
A través de incontables eones,
Cuando escapen de los infiernos,
Ellos tomaran los cuerpos de animales,
Tales como perros o chacales y sus similares,
Altos y flacos,
Negros, manchados, encostrados,
Y repulsivos a otros.
Además serán odiados y desdeñados
Por los seres humanos,
Siempre sufriendo de hambre y sed,
Sus huesos y carne estarán restringidos.
Durante sus vidas tendrán perforaciones de espinas venenosas;
Cuando mueran ellos serán enterrado bajo lapidas y piedras.
Ellos sufrirán esta retribución por su ofensa,
Porque han arrancado sus semillas Búdicas.
Pueden llegar a ser camellos
O nacer entre los burros,
Siempre llevando a cuesta cargas pesadas
Y golpeados con palos y látigos,
Pensando sólo en el agua y el pasto,
Sin conocer nada más.
Ellos sufren retribuciones como estas
Por difamar este Sutra.
Algunos pueden devenir chacales,
Entrando a las villas,
Con sus cuerpos cubiertos con sarna y llagas,
Y también sin un ojo,
Golpeados y apedreados
Por muchachos jóvenes,
Pasan toda una serie de dolores,
Inclusive hasta el punto de la muerte.
Habiendo muerto de esta forma
Ellos entonces renacen como serpientes inmensas,
Con cuerpos tan largos como quinientos Yojanas.
Sordos y estúpidos, sin pies,
Se arrastran en sus estómagos,
Aguijoneados y comidos por muchos insectos pequeños.
Pasando sufrimientos día y noche
Sin intervalo alguno,
Ellos sufren tal retribución
Por haber difamado este Sutra.
Si ellos devienen humanos,
Todas sus facultades estarán embotadas y disminuidas.
Ellos son obesos, feos, paralíticos y cojos,
Ciegos, sordos y jorobados.
Las personas no creerán
Cualquier cosa que puedan decir.
Ellos transpiran siempre pudrición,
Y serán poseídos por fantasmas.
Pobres e inferiores
Serán los sirvientes de otros.
Siempre enfermos y raquíticos,
Con nadie a quien acudir o responderle.
Aunque puedan estar cerca de otros,
Los otros nunca pensarán en ellos.
Si ganan alguna cosa
Ellos rápidamente la olvidan o la pierden.
Si estudian las formas de la medicina,
Siguiendo las prescripciones para curar enfermedades,
Ellos solamente harán que los otros se pongan peor;
Incluso hasta el punto de la muerte.
Si se enferman,
Nadie trata de salvarlos o curarlos.
Aunque tomen una medicina buena,
Eso sólo les aumentará sus dolores.
Si se unen a una rebelión,
Serán saqueados y robados.
Personas con tales ofensas,
Serán expuestos perversamente a tales desdichas.
Transgresores como esos nunca verán al Buda— El rey entre las congregaciones de santos,
Que habla el Dharma, enseña y transforma.
Pecadores como estos
Siempre nacerán en circunstancias difíciles.
Locos, sordos, con una mente confusa,
Nunca oirán el Dharma.
A través de eones, tan incontables
Como las arenas del Río Ganges,
Ellos nacerán sordos y mudos,
Con todas sus facultades incompletas,
Ellos siempre vivirán en los infiernos,
Vagando allí como si estuvieran en jardines placenteros,
O nacerán en otros caminos diabólicos,
Que tomaran como sus casas y hogares.
Entre camellos, burros, cerdos y perros—
Esos serán los lugares que caminarán.
Ellos pasarán esas retribuciones,
Por difamar este Sutra.
Si devienen humanos,
Serán sordos, ciegos y mudos,
Pobres y decrépitos,
No obstante se adornen ellos mismos con lo que sea.
Inflados de agua o deshidratados,
Con llegas y tumores,
Y otras enfermedades similares,
Ellos se cubrirán a sí mismos.
Sus cuerpos siempre apestaran
De inmundicia e impureza.
Profundamente apegados a los puntos de vista del ‘yo’,
Su odio siempre aumentará.
Abrazados con deseo sexual,
Ellos no son diferentes de las aves o las bestias.
Ellos sufrirán esa retribución
Por haber difamado este Sutra.
Te digo, Shariputra,
Si fuera hablar de las ofensas
De esos que difaman este Sutra,
No terminaría hasta el final de un eón.
Por esas razones,
Expresamente te digo,
No prediques o hables este Sutra
Entre aquellos que no tienen sabiduría.
Si hay esos con facultades devotas,
Y sabiduría que claramente comprende,
Con mucho aprendizaje y memoria fuerte,
Que buscan el camino de Buda,
A personas como estas
Puedes predicarle y hablarles este Sutra.
Si hay aquellos que han visto en el pasado
Cientos de miles de millones de Budas,
Que han plantado raíces sanas,
Que tienen mentes profundas y firmes,
A personas como estas
Puedes predicarle y hablarles este Sutra.
Si hay aquellos que son energéticos,
Siempre cultivando las mentes con la compasión,
Sin escatimar el cuerpo o la vida,
Para ellos puedes predicarlo o hablarlo.
Si hay aquellos que son reverentes,
Sin ningún otro pensamiento,
Que se han apartado de las personas cerradas y ordinarias,
Que habitan en soledad en las montañas y las marismas,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Además, Shariputra,
Si ves personas
Que se han apartado de consejeros ignorantes que predican el mal,
Y se acercan a los amigos buenos,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si ves discípulos de Buda,
Que sostienen los preceptos puramente,
Como joyas puras y brillantes,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si hay aquellos que no tienen odio
Que son correctos y gentiles,
Siempre compasivos con todos los seres,
Y reverentes de todos los Budas,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Asimismo, si hay discípulos de Buda,
Que en la gran asamblea
Con mentes claras y puras,
Usan varias condiciones causales,
Parábolas y frases,
Para hablar el Dharma sin obstrucción,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si hay Bhikshus,
Que por el beneficio de la sabiduría completa,
Buscan el Dharma en las cuatro direcciones,
Con las palmas unidas, recibiéndolo sobre la coronilla,
Que solamente se deleitan recibiendo y sosteniendo
El canon de los Sutras del Gran Vehículo,
Rehusando completamente aceptar
Una sola línea de otra escritura,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si hay aquellos que, con un objetivo en mente,
Buscan las sariras de Buda,
O que similarmente buscan los Sutras,
Y los alcanzan y sostienen sobre sus coronillas;
Esas personas que nunca jamás
Determinan buscar otros Sutras
Ni tienen nunca el pensamiento
De buscar las escrituras fuera del Camino,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
- Te digo Shariputra,
Si fuera hablar de las características
De esos que buscan el Camino de Buda,
Agotando eones, no terminaría nunca.
Personas como esas
Pueden creer y entender,
Y por su beneficio, tú debes predicar
El Dharma Maravilloso del Sutra de la Flor de Loto.
- Ahora, habiendo escuchado este sonido del Dharma del Honrado por el Mundo, mi corazón se regocija y he logrado lo que nunca antes había tenido.
- ¿Cuál es la razón? En el pasado, he oído de Buda un Dharma como éste, y he visto los Bodhisattvas recibir predicciones de Budeidad, pero no tuvimos parte en este asunto. Yo estaba herido profundamente por haber perdido el conocimiento y la visión profunda del Así Venido.
- Honrado por el Mundo, cuando yo vivía en soledad en los bosques de las montañas, ya sea caminando o sentado al pie de los árboles, continuamente estaba pensando: ‘Nosotros todos entramos idénticamente en la naturaleza del Dharma. ¿Por qué el Así Venido nos ha enseñado la liberación a través del Dharma del Vehículo Pequeño?
- ¿Cuál es la razón? Si hemos esperado por la conferencia sobre las causas de alcanzar el Anuttarasamyaksambodhi, debemos ciertamente haber sido liberados a través del Gran Vehículo. Pero no entendimos que ese expediente diestro se había pronunciado de acuerdo a lo que era apropiado. Por lo tanto, cuando primeramente escuchamos el Dharma-del-Buda, inmediatamente después de conocerlo, lo creímos, aceptamos, consideramos y nos certificamos en él.
- Honrado por el Mundo, desde el pasado, día y noche, continuamente me censuré. Ahora, he oído de Buda lo que nunca antes había oído, este Dharma que nunca antes había sido, y todas mis dudas se han terminado. Mi cuerpo y mi mente se han regocijado y estoy en paz.
- Hoy, definitivamente, sé que soy un discípulo verdadero de Buda, nacido de la boca de Buda y transformado por el Dharma; he logrado una participación en el Dharma-del-Buda.
En ese momento Shariputra, deseando reiterar este significado, habló en versos diciendo lo siguiente:
- Oyendo el sonido de este Dharma,
He alcanzado lo que nunca he tenido,
Mi corazón esta rebosante de gozo,
Y la trama de dudas ha sido apartada.
Desde la antigüedad, favorecido con la enseñanza de Buda,
Nunca he perdido el gran vehículo.
El sonido de Buda es extremadamente raro,
Y puede liberar los seres de sus aflicciones.
Ya yo he llegado al final de las filtraciones,
Y ahora al escucharlo mis angustias se disipan.
Mientras habito en los valles montañosos,
Algunas veces al pie de los árboles,
Ya sea sentado o parado,
Constantemente pienso sobre este tópico.
Oh, lloro reprochándome agriamente:
¿Por qué me he auto-engañado?
Nosotros, también somos los discípulos de Buda,
E igualmente entramos en el Dharma de la no-filtración;
Sin embargo en el futuro no seremos capaces
De proclamar el camino insuperable.
El color dorado, las Treinta y Dos,
Los Diez Poderes y todas las liberaciones,
Todas juntas son un solo Dharma,
Pero yo no he alcanzado esas cosas.
Las Ochentas Excelencias Maravillosas,
Los Dieciocho Dharmas Indivisibles,
Esas cualidades de virtudes,
Las he perdido todas y cada una.
Mientras caminaba solo
Veía al Buda en la Gran Asamblea,
Su reputación llenaba las diez direcciones,
Beneficiando extensamente a todos los seres.
Y sentí que había perdido estos beneficios,
Y me había engañado a mí mismo.
Constantemente, día y noche,
Pensé sobre esto,
Y deseé preguntarle al Honrado por el Mundo
Si los había perdido o no.
Observé frecuentemente al Honrado por el Mundo
Alabando a todos los Bodhisattvas,
Y así, día y noche,
Continué deliberando sobre estas cosas.
Ahora oí el sonido de Buda,
Hablando ese Dharma sin filtraciones oportunamente— El cual es difícil de concebir
Y guía a los seres vivientes al Bodhimanda.
Una vez estuve apegado a los puntos de vista desviados,
Fui un maestro de Brahmanes.
Y el Honrado por el Mundo conociendo mi corazón,
Me saco las desviaciones y me enseñó el Nirvana.
Me auto-desprendí de los puntos de vistas desviados,
Me certifiqué en el Dharma del Vacío,
Y entonces me dije
Que había llegado a la extinción.
Pero ahora por fin comprendí
Que eso no era la extinción,
Porque cuando devenga un Buda
Completo con las Treinta y dos Marcar,
Reverenciado por dioses, humanos y Hordas de Yaksha,
Dragones, espíritus y demás,
Solamente entonces seré capaz de decir,
“Esta es la extinción eterna sin residuo”.
El Buda en la Gran Asamblea,
Ha dicho que yo devendré un Buda,
Oyendo ese sonido Dharmático,
Se han dispersado todas mis dudas.
Cuando por primera vez escuché al Buda hablar, Mi corazón se llenó de gran temor.
¿No es éste Mara disfrazado de Buda,
Que viene a perturbarme y confundir mi corazón?
El Buda, a través de diferentes condiciones,
Analogías y discursos ingeniosos,
Hace que el corazón de uno se calme como un mar.
Oyéndolo la malla de mis dudas se desenredó.
El Buda dice que en el pasado
Los Budas ilimitados, ahora extintos,
Habitaban calmadamente en los expedientes,
Y también hablaban este Dharma—cada uno de ellos
En números ilimitados,
Usaban también los expedientes,
Para proclamar el Dharma como éste.
Igualmente ahora el Honrado por el Mundo
Desde el nacimiento hasta que dejó el hogar,
Alcanzó el Camino e hizo girar la Rueda del Dharma,
También habló a través de expedientes.
El Honrado por el Mundo predica el camino verdadero.
El diabólico no hace esas cosas,
Dado que yo ahora sé con toda seguridad
Que éste no es el demonio haciéndose pasar por un Buda.
Porque hube caído en la malla de las dudas,
Dije que éstas eran las acciones de un demonio.
Oyendo la voz con la objeción de Buda,
Profunda, lejana de alcanzar, sutil y fina,
Proclamando ampliamente el Dharma claro y puro,
Grande es el gozo en mi corazón.
Mis dudas se han terminado para siempre,
Dado que estoy parado firme en la sabiduría verdadera.
Tengo la certeza de llegar a ser un Buda,
Reverenciado por dioses y humanos.
Yo haré girar la Rueda Insuperable del Dharma,
Para enseñar y transformar los Bodhisattvas.
En ese momento el Buda le dijo a Shariputra:
- Yo ahora, en el medio de la gran asamblea de dioses, humanos, shramanas, brahmanes y otros, declaro que en el pasado distante, en la presencia de veinte mil millones de Budas, por el beneficio del pasado insuperable, yo te he enseñado y transformado constantemente. Y tú, a través de la noche larga, me has seguido y recibido mi instrucción. Yo he usado expedientes diestros para guiarte a nacer en mi Dharma.
- Shariputra, en el pasado te enseñé a que hicieras la resolución de tomar el Camino de Buda, pero tú lo has olvidado completamente, y por lo tanto te has dicho que ya habías alcanzado la extinción.
- Ahora de nuevo, deseando que recuerdes el camino has practicado de acuerdo a tus votos pasados, yo por el beneficio de los Oyentes Correctos, hablo este Sutra del Gran Vehículo nombrado ‘El Dharma Maravilloso de los Flor de Loto’, un Dharma para instruir a los Bodhisattvas que los Budas protegen y cuidan.
- Shariputra, en la edad futura, después de eones ilimitados e inconcebibles, habiendo hecho ofrendas a algunas miles de miríadas de millones de Budas, habiendo reverenciado y sostenido en alto el Dharma correcto, y habiendo perfeccionado el camino practicado por los Bodhisattvas, tú devendrás un Buda con el nombre de Así Venido Flor de Luz, Valuable de Ofrendas, de Conocimiento Propio y Universal, Uno que su Entendimiento y Conducta es Completa, Uno Bien Ido que Entiende al Mundo, un Señor Insuperable, un Héroe que Domestica y Regula, un Buda, un Honrado por el Mundo.
- Esta tierra se llamará “Aparte de la Inmundicia’. Su suelo será nivelado, puro, adornado, tranquilo, prospero, y abundante de dioses. Su terreno será de lapislázuli y las ocho calles que la interceptan estarán bordeadas de cordones de oro, a través de los cuales estarán situadas líneas de árboles hechos de las siete joyas que constantemente estarán floreciendo y fructificando.
- El Así Venido Flor de Luz, enseñará y transformará también a los seres vivientes a través de los Tres Vehículos. Shariputra, cuando este Buda llegue al mundo, si bien no será en una edad diabólica, por estos votos pasados, él enseñará el Dharma de los Tres Vehículos.
- A ese eón se le llamará ‘Adornado con Grandes Joyas’. ¿Por qué se le llamará as, ‘Adornado con Grandes Joyas’? Porque en esa tierra los Bodhisattvas serán considerados Grandes Joyas.
- Estos Bodhisattvas estarán en números inconcebibles, ilimitados e infinitos, más allá del alcance de las calculaciones o analogías. Con la excepción del poder de la sabiduría de Buda, nada será capaz de conocer su número.
- Cuando ellos deseen caminar, flores enjoyadas surgirán bajo sus pies. Estos Bodhisattvas no serán esos que han hecho surgir sus pensamientos últimamente. Ellos habrán plantado las raíces de virtud por largo tiempo, y en la presencia de ilimitados cientos de miles de miríadas de Budas, han cultivado puramente la conducta de Brahma, constantemente recibiendo la alabanza de Buda. Cultivando continuamente la sabiduría de Buda y completos con las grandes penetraciones espirituales, ellos serán bien versados en todas las puertas del Dharma, con voluntad correcta, ingeniosa y fuerte, tales como esos que llenan esta tierra.
- Shariputra, el tiempo de vida del Luz de Flor será de doce pequeños eones, sin contar el tiempo durante el cual, como un príncipe, él todavía no habrá llegado a ser un Buda. El tiempo de vida de las personas en esa tierra será de ocho pequeños eones.
- Después de doce eones, el Así Venido Luz de Flor le conferirá al Bodhisattva ‘Solidez Completa’ una predicción de Anuttarasamyaksambodhi, y anunciará a los Bhikshus que el Bodhisattva Solidez Completa devendría en breve un Buda con el nombre de ‘Pies Florecidos Caminando Pacíficamente”, Tathagata, arhat, Anuttarasamyaksambodhi. Su tierra de Buda será de un carácter similar.
- Shariputra, cuando el Buda Flor de Luz haya pasado a la extinción, el Dharma verdadero morará en el mundo por treinta y dos pequeños eones. El Dharma parecido morará en el mundo por treinta y dos pequeños eones.
En ese momento, el Honrado por el Mundo, deseando reiterar este significado, habló en versos diciendo:
- Shariputra, en una edad futura,
Habrá un Buda, honrado y completamente sabio,
Con el nombre de Luz de Flor,
Que salvará multitudes ilimitadas.
Habiendo hecho ofrendas a Budas incontables,
Perfeccionado la conducta del Bodhisattva y
Los Diez Poderes y otras cualidades meritorias,
El se certificará en el camino insuperable.
Cuando los eones ¡limitados hayan pasado,
Habrá un eón nombrado “Adornado con Grandes Joyas”.
Y un mundo con el nombre de “Aparte de la Inmundicia”,
Puro y sin filtraciones,
Con lapislázuli como suelo,
Y sus calles bordeadas con cordones dorados,
Con árboles multicolores hechos de las siete joyas,
Que constantemente florecen y fructifican.
Los Bodhisattvas en esa tierra,
Tendrán siempre atención plena,
Con penetraciones espirituales y Paramitas,
Todos perfeccionados completamente
En la presencia de Budas incontables,
Ellos aprenderán muy bien el Camino del Bodhisattva.
Grandes señores como estos
Serán transformados por el Buda Luz de Flor.
Ese Buda, cuando todavía sea príncipe,
Renunciará a su tierra y a su gloria mundana,
Y en su cuerpo final,
Dejará el hogar para alcanzar el Camino del Buda.
El Buda Luz de Flor habitará en el mundo
Por un espacio de tiempo de doce pequeños eones.
Las personas de su tierra
Vivirán por ocho pequeños eones.
Cuando ese Buda se haya extinguido,
El Dharma correcto permanecerá en el mundo
Por treinta y dos pequeños eones,
Predicándose extensamente a los seres vivientes.
El Dharma semejante permanecerá por treinta y dos.
Las sariras se distribuirán extensamente,
Para los ofrecimientos de dioses y humanos.
Las acciones del Buda Luz de Flor,
Deben ser así.
Ese honrado sabio, doblemente perfecto,
Será supremo y más allá de comparación.
¡Y simplemente eres tú mismo!
Así que es correcto y apropiado que te regocijes.
En ese momento, la asamblea cuádruple de Bhikshus, Bhikshunis, Upasakas, Upasikas, tanto como la gran multitud de Yakshas, Gandharvas, Asuras, Garudas, Kinnaras, Mahoragas, y así sucesivamente, viendo a Shariputra, en la presencia del Buda recibiendo una predicción para el Anuttarasamyaksambodhi, se regocijaron grandemente en sus corazones y saltaron de abundante gozo.
Cada uno removió la parte superior de su vestimenta y se la presentó como ofrenda al Buda. Shakro Devanam Indrah y el rey Celestial Brahma, junto con incontables dioses, también les hicieron ofrecimientos al Buda de maravillosas vestimentas celestiales, flores celestiales Mandaravas y Mahamandaravas, y así sucesivamente.
Las vestimentas celestiales que ellos tiraron al aire permanecieron en el espacio vacío circumambulando alrededor. Entonces repentinamente al mismo tiempo, en el espacio vacío, cientos de miles de miríadas de clases de músicas celestes comenzaron a sonar, y cayó una lluvia de flores celestiales.
Al mismo tiempo ellos pronunciaban estas palabras: “Hace mucho
tiempo, en Varanashi, el Buda primeramente hizo girar la rueda del
Dharma. Ahora, él hace girar de otra vez la insuperable y magnificente
Rueda del Dharma”.
En ese momento todos los dioses, deseando reiterar este significado, hablaron en verso diciendo:
- Hace mucho tiempo en Varanashi,
Tú hiciste girar la Rueda del Dharma de las Cuatro Nobles Verdades,
Discriminando y discerniendo los Dharmas,
La producción y la extinción de los Cinco Acumulaciones.
Ahora de nuevo has hecho girar la maravillosa
E insuperable gran rueda del Dharma,
Lo recóndito y profundo de este Dharma,
Y sólo unos cuantos son los que pueden creerlo.
Nosotros, desde hace mucho tiempo,
Hemos frecuentemente hemos oído hablar al Honrado por el Mundo,
Pero nunca habíamos oído ese Dharma,
Tan profundo, maravilloso y supremo.
El Honrado por el Mundo ha predicado el Dharma,
Y nosotros nos regocijamos en acuerdo;
Ahora, que el gran sabio Shariputra
Recibe la predicción del Honrado por el Mundo;
Nosotros también somos como esto,
Y seguramente devendremos Budas[11],
Y a través de todos los mundos,
Seremos honrados y supremos.
El Camino de Buda es inconcebible,
Enseñando diestramente de acuerdo a lo apropiado.
Que todo nuestras bendiciones karmáticas,
Es esta vida y en las pasadas,
Y los méritos y virtudes ganados de ver a los Budas,
Se dediquen al Camino del Buda.
En ese momento, Shariputra le habló al Buda diciendo:
- Honrado por el Mundo, habiendo recibido de Buda una predicción para el Anuttarasamyaksambodhi, ahora ya no tengo más dudas o vacilaciones. Pero los mil doscientos cuyos corazones han alcanzado el dominio propio, y que previamente han habitado en el estado de estudio, y eran enseñados constantemente por el Buda que dijo: “Mi Dharma puede capacitarle a uno el separarse del nacimiento, la vejez, la enfermedad y la muerte, y han logrado el Nirvana Ultimo”; esos que estudian y aquellos más allá del estudio que igualmente se han separado del punto de vista del ‘yo’, los puntos de vista de la existencia y la no-existencia, y así sucesivamente, y claman que ellos han alcanzado el Nirvana; ellos no obstante, oyendo del Honrado por el Mundo eso que nunca han oído antes, han caído en las dudas y el engaño. Definitivamente Bondadoso y Honrado por el Mundo, te suplicamos que por el beneficio de la asamblea cuádruple, hables de esas causas y condiciones, para liberarlos de sus dudas y vacilaciones.
En ese momento el Buda le dijo a Shariputra:
- ¿No he dicho antes que todos los Budas, Honrados por el Mundo, hablan el Dharma a través de varias causas y condiciones, parábolas, frases, y expedientes diestros, todo por el beneficio del Anuttarasamyaksambodhi? Todas estas enseñanzas son para el beneficio de la transformación de los Bodhisattvas. Sin embargo, Shariputra, ahora de nuevo usaré una parábola para adicionalmente clarificar el principio, para que todos aquellos que son sabios expandan el entendimiento a través de alegorías.
- Shariputra, suponte que en un país, una ciudad o una villa, hay un gran anciano, con muchos años de vida, de salud perfecta, y riquezas ilimitadas. El posee haciendas, casas y sirvientes.
- Su casa es espaciosa y grande, teniendo sólo una puerta y viviendo en ella una gran cantidad de personas, cien, doscientos, incluso quinientas personas.
- Sus pasillos y habitaciones estaban deteriorados y viejos, y sus paredes cayéndose. Los pilares estaban corroídos en sus bases y sus vigas y columnas se estaban peligrosamente colapsando.
- Entonces al momento, a través de la casa, surge un fuego que se extiende por toda ella.
- Los hijos del anciano, diez, veinte, incluso treinta de ellos, se encuentran dentro de la casa.
- El anciano, mirando el fuego que ha surgido de los cuatro lados de la casa, se alarma enormemente y reflexiona: “Aunque he escapado salvo a través de la puerta en llamas, todos mis hijos permanecen dentro de la casa que se está quemando, apegados felizmente a sus placeres, inconscientes, sin saber, sin alarmarse y sin temer. El fuego se está apoderando de ellos y se quemarán con dolor, pero en el fondo a ellos no les importa, ni tienen ningún pensamiento de escapar”.
- Shariputra, el anciano entonces reflexiona de nuevo: “Tengo cuerpo y brazos fuertes. Así que los puedo sacar de la casa en un saco o sobre una carretilla’. El anciano continúa reflexionando: “Esta casa tiene solamente una puerta y es estrecha y pequeña. Mis hijos son jóvenes e inmaduros y todavía no saben nada. Apegados a su sitio de juegos, ellos pueden caer y quemarse en el fuego. Debo decirles de este asunto tan atemorizante, que la casa ha cogido fuego y ellos deben apurarse en salir para no quemarse”. Así pensando, él le habla a sus hijos, diciendo: “iRápido, salgan de la casa todos ustedes!” Aunque el padre en su compasión los induce con buenas palabras, todavía los hijos están apegados a sus placeres y juegos y rehúsan creerle. Ellos no tienen miedo ni temor, ni la menor intención de irse. Lo que es más, ellos no saben lo que quiere decir ‘fuego’, o ‘casa’, o lo que significa ‘estar perdido’. Ellos meramente corrían por toda la casa, de este a oeste, porque estaban jugando, y mirando a su padre.
- Entonces el anciano pensó: “La casa está en llamas en medio de un gran fuego. Si mis hijos no salen a tiempo, seguro que se quemarán. Ahora inventaré un expediente o recurso hábil para que mis hijos puedan evitar este desastre.
- El padre, conociendo las predisposiciones de sus hijos y las preferencias que cada uno tenía por sus diferentes juguetes y sus distintos juegos a los cuales ellos respondían felizmente, les habló diciéndoles: “Las cosas con que a ustedes les gustaría jugar, son raras y difíciles de obtener. Si ustedes no las recogen, seguramente después se arrepentirán. Objetos como esos: ‘una variedad de carritos y carretillas de cabras, ciervos y bueyes, están ahora fuera de la puerta de la casa esperando que ustedes jueguen con ellos. Todos ustedes deben salir rápidamente de esta casa en llamas y les daré lo que deseen.
- Entonces los muchachos, oyendo a su padre hablar de esos juguetes preciosos que colmaban exactamente sus expectaciones y deseos, entusiasmadamente se empujaron unos a los otros hacia fuera de la casa en una carrera loca, todos peleando para salir de la casa en llamas.
- En ese momento, el anciano, viendo que sus hijos habían salido de la casa, sanos y salvos, y estaban sentado en la calle en la acera de enfrente, sin ningún otra obstrucción, se sintió en paz y lleno de felicidad.
- Entonces los hijos todos le dijeron a su padre: “Por favor, padre, danos los juguetes hermosos que nos prometiste hace un rato, las carretillas de las cabras, ciervos y bueyes.
- Oh, Shariputra, en ese momento el anciano le dio a todos sus hijos igualmente un gran carruaje.
- Un carruaje alto y ancho, adornado con una multitud de joyas entrelazadas, rodeado de balaustres y con campanas colgando en sus cuatro esquinas. Además, estaba cubierto con toldos adornados con joyas raras y diferentes, ensartado con cordones enjoyados y adornado con flores colgantes. El carruaje estaba forrado con alfombras hermosas y almohadas de rosas. Se acoplaba o unía a una
pareja de bueyes, uno blando y el otro morado de una apariencia excelente y de una gran fuerza muscular, que caminaban con un trote
calmado, volando como el viento; teniendo también muchos sirvientes que los seguían y cuidaban.
- ¿Y por qué es esto? Ese gran anciano tenía riquezas ilimitadas y toda clase de almacenes llenos hasta el borde.
- Así que él reflexionó nuevamente: “Mis posesiones son ilimitadas, así que no debo darle a mis hijos unos carros inferiores o pequeños. Todos esos jovencitos son mis hijos, a los que amo sin parcialidad.” Habiendo mandado a hacer esos carruajes con las siete joyas, infinitas en número, debe de dárselos igualmente a cada uno. ¿Por qué? Porque aunque los repartiera entre todos los habitantes del país completo, aun sobraría, ¡Cuánto menos sería si se los doy solamente a ellos!
- Mientras tanto, todos los muchachos estaban montando sus carruajes por los alrededores, habiendo obtenido lo que nunca habían esperado, más allá de sus deseos originales.
- Shariputra, ¿qué piensas? Cuando el anciano les da igualmente a
todos sus hijos los carruajes enjoyados, ¿es él culpable de falsedad o
no?
Shariputra respondió:
- No, Honrado por el Mundo. El anciano no es culpable de falsedad, porque solamente les ha capacitado a sus hijos el evitar la calamidad del fuego, y les ha salvado sus vidas. ¿Por qué es esto? Al salvar sus vidas él le ha dado ya un algo muy bueno. ¿Cuánto más no será en preparar los expedientes para salvarlos de la casa en llama?
- Honrado por el Mundo, si ese anciano inclusive no les hubiera dado ni un solo carrito, él todavía no habría hablado falsedad. Porque el anciano previamente tuvo el siguiente pensamiento: “Usaré expedientes para guiarlos a salir de la casa”. Por esa razón él no es culpable de falsedad. Incluso él es mucho menos culpable, sabiendo que su propia riqueza es ilimitada y deseando beneficiar a todos sus hijos, él les da igualmente a todos un gran carruaje.
El Buda le dijo a Shariputra:
- ¡Definitivamente bien, definitivamente bien! Es así como lo has dicho.
- Shariputra, el Así Venido es también así; es el padre de todos en el mundo. El ha terminado para siempre todos los temores, las debilidades, las preocupaciones, la ignorancia y la oscuridad. Ha alcanzado completamente el conocimiento, la visión, la valentía y los poderes ilimitados. El tiene la gran fortaleza espiritual y el poder de la sabiduría. Ha perfeccionado los Paramitas de los Expedientes y de la sabiduría. El es grandemente gentil y compasivo. Nunca se cansa, siempre buscando el bien para beneficiar a todos. Y consecuentemente él ha nacido en los Tres Dominios que son como la casa en llamas; para salvar a los seres vivientes del fuego del nacimiento, la vejez, la
enfermedad, la muerte, el sufrimiento, la miseria, la estupidez, el embotamiento y en los Tres Venenos. El los enseña y transforma, guiándolos al logro del Anuttarasamyaksambodhi.
- Él ve que todos los seres vivientes están consumidos por el nacimiento, la vejez, la enfermedad, la muerte, el sufrimiento y la miseria. Ellos pasan a través de variados sufrimientos de los Cinco Deseos, la riqueza y la ganancia. Además, por sus apegos y avaricia, ellos, en el presente, pasan a través de una gran cantidad de sufrimiento y en el futuro irán a sufrir en los infiernos, entre los animales, o los fantasmas hambrientos. Si nacen en los cielos o entre los seres humanos, ellos sufrirán la pobreza y la angustia, el sufrimiento de estar separado de los seres queridos, el sufrimiento de estar unido a lo que odia, y todos los diferentes sufrimientos como los anteriores. A pesar de eso, los seres vivientes se hunden en este caos, banales, inconscientes, ignorantes, despreocupados y sin ningún temor. Ellos nunca se satisfacen ni buscan la liberación. En la casa en llamas de los Tres Dominios ellos corren de un lugar a otro, del este al oeste. Y aunque se tropiezan con sufrimientos enormes, a ellos no les importa.
- Shariputra, habiendo visto esto, el Buda además piensa: “Yo soy el padre de los seres vivientes. Debo rescatarlos de este sufrimiento y dificultades, y les doy la bienaventuranza infinita e ilimitada de la sabiduría de Buda para que participen en ella.
- Shariputra, el Así Venido además piensa: “Si meramente uso el poder espiritual y el de la sabiduría, y aparto los expedientes, alabando, para todos los seres vivientes, el poder del conocimiento, de la visión, los poderes y la valentía del Así Venido, los seres vivientes no serán capaces de salvarse de esta forma. ¿Por qué es esto? Todos estos seres vivientes todavía no han escapado del nacimiento, la vejez, la enfermedad, la muerte, el sufrimiento y la miseria. Ellos son seres que se consumen en la casa en llamas de los Tres Dominios. ¿Cómo pueden ellos entender la sabiduría del Buda?
- Shariputra, al igual que ese gran anciano, que aunque tenía un cuerpo y unos brazos poderosos no los usó para rescatar a sus hijos sino que aplicó diestramente expedientes y recursos para salvarlos y después les dio un gran carruaje adornado con joyas preciosas; en esa misma forma, el Así Venido, aunque posee poderes e intrepidez, no los usa.
- Él meramente usa la sabiduría y los expedientes para rescatar a los seres vivientes en la casa en llama de los Tres Dominios, hablándoles de los Tres Vehículos; el de los Oyentes Rectos, el de los Pratyeka Buddha y el del Vehículo de Buda.
- Y él Así Venido le dice a ellos: ‘Todos ustedes no deben sentir placer viviendo en la casa en llama de los Tres Dominios. No deseen las formas, los sonidos, los olores, los gustos y los objetos tangibles vulgares y malévolos. Si se apegan a ellos egoístamente y hacen que surja el amor por ellos, ustedes se quemarán. Deben escapar rápidamente de los Tres Dominios y obtener los Tres Vehículos; el de los Oyentes Rectos, el de los Pratyeka Buddha y el del Vehículo de Buda. Al presente les doy mi garantía para esto y eso nunca podrá ser una falsedad. Ustedes sólo necesitan practicar diligente y energéticamente. El Así Venido usando estos medios y recursos diestros guía a todas las criaturas.
Además él dice: “Todos ustedes deben saber que los Dharmas de los Tres Vehículos han sido alabados por los sabios. Ellos harán que sean libres, emancipados e independientes. Montando sobre estos Tres Vehículos, por medio de las raíces de las no-filtraciones, los poderes, las iluminaciones, los caminos, los Dianas, las concentraciones, las liberaciones, los Samadhis y así sucesivamente, ustedes se entretendrán y alcanzaran la paz y la felicidad”.
- Shariputra, si hay seres vivientes que poseen interiormente la naturaleza-sabia, y escuchan el Dharma del Buda - el Honrado por el Mundo - creyéndolo y aceptándolo, y diligentemente progresando, deseando rápidamente escapar de los Tres Dominios y buscando el Nirvana para sí, ellos se llaman los del Vehículo del Oyente Recto. Ellos son como los hijos que buscaron la carretilla de las ovejas y así escapan de la casa en llama.
- Si hay seres vivientes que oyendo el Dharma de Buda — el Honrado por el Mundo — lo creen y aceptan, diligentemente progresando y buscando por sí mismos la sabiduría espontánea, deleitándose en la soledad y amando la calma, entendiendo profundamente las condiciones causales de todos los Dharmas, ellos se llaman los del Vehículo de los Pratyeka Budas. Ellos son como los hijos que buscaron por la carretilla de los ciervos y así escaparon de la casa en llama.
- Si hay seres vivientes que oyendo el Dharma de Buda — el Honrado por el Mundo — lo creen y aceptan, practicando honestamente con energía, buscando toda la sabiduría, la sabiduría no-enseñada, el conocimiento y la visión del Así Venido, sus poderes y valentía, compadeciéndose y confortando a los infinitos seres vivientes, beneficiando a los dioses y humanos, salvándolos a todos, a ellos se les llaman los del Gran Vehículo. Porque los Bodhisattvas buscan este vehículo, a ellos se les llama Mahasattvas. Ellos son como los hijos que buscaron la carretilla de bueyes y así escaparon de la casa en llama.
- Shariputra, al igual que el gran anciano, viendo que todos sus hijos habían escapado sanos y salvos de la casa en llamas a un lugar seguro, y considerando su propia riqueza ilimitada, le da a todos ellos un gran carruaje, así el Así Venido, en la misma forma, es el padre de todos los seres vivientes. Cuando él ve los millones ilimitados de seres vivientes usando el portón de salida de las enseñanzas de Buda para liberarse del temor y los caminos peligrosos del sufrimiento de los Tres Dominios y lograr la bienaventuranza del Nirvana, él piensa: “Tengo sabiduría ilimitada e infinita, poderes, valentía y así sucesivamente—el almacén completo del Buddhadharma. Todos esos seres vivientes son mis hijos. Debo darles a todos ellos un gran carruaje, no dejando que alcancen la extinción individual, sino cruzándolos hacia la extinción a través de la extinción del Así Venido. Habiendo escapado de los Tres Dominios, a todos esos seres vivientes se les da como entretenimiento las concentraciones Dhyana de Buda, las liberaciones y así sucesivamente, todas de una sola marca y una sola clase, alabada por los sabios y fructífera de la bienaventuranza principal, pura y maravillosa.
- Shariputra, al igual que primeramente el gran anciano usó las tres carretas para atraer a sus hijos y entonces más adelante les dio un gran carruaje adornado con joyas y supremamente cómodo, no es culpable de falsedad. Justo así, el Así Venido, similarmente no culpable de falsedad al hablar primeramente de los Tres Vehículos para atraer a los seres vivientes y entonces después liberarlos sólo a través del Gran Vehículo. ¿Cuál es la razón? El Así Venido tiene sabiduría ilimitada, poderes y valentía, un almacén de Dharmas, y es capaz de darles a todos los seres vivientes el Dharma del Gran Vehículo. Sin embargo, no todos los seres vivientes son capaces de aceptarlo. Shariputra, por estas causas y condiciones debes saber que los Budas, usando el poder de los expedientes diestros, en el Unico Vehículo de Buda, discriminan y hablan de tres.
El Buda, deseando reiterar este significado, habló en versos diciendo:
- Supongamos que hay un gran anciano
Muy viejo y acaudalado,
Que tiene una gran mansión
Que se está colapsando.
Los pasillos son altos y están en malas condiciones,
Los pilares están corroídos en sus bases,
Las vigas y las columnas inclinadas,
Los cimientos y las escaleras se están derrumbando.
Las paredes exteriores e interiores están en ruinas,
Y el yeso de los emplastes de las paredes descascarando y
desprendiendo.
La techumbre se está cayendo de todas formas,
Y las vigas y aleros se están desprendiendo.
Las paredes interiores de toda la casa se están doblando,
Y están cubiertas de toda clase de suciedad.
En la casa había quinientas personas viviendo en ella.
Había lechuzas, halcones, y buitres,
Cuervos, palomas, urracas, cotorras,
Serpientes negras, víboras y escorpiones,
Ciempiés, y milpiés.
Había lagartijas, y miriápodos,
Comadrejas, tejones y ratones—
Toda clase de criaturas malignas
Corriendo por la casa de arriba abajo.
Había lugares apestados con excrementos y orina,
Manando en inmundicia,
Con excrementos de cucarachas
Amontonados sobre ellas.
Había lobos, zorros y chacales
Que se comían y devoraban cadáveres,
Esparciendo la carne y los huesos.
Entonces manadas de perros
Hambrientos, débiles y aterrorizados,
Llegaban corriendo para cogerlos,
Peleando y escarbando,
Aullando, gruñendo y ladrando.
El terror y el espectáculo en esa casa
Eran de esa forma.
Li Mei y Wang Liang[12]
Estaban en todas partes.
Los Yakshas y los fantasmas diabólicos
Estaban comiendo carne humana.
Había criaturas venenosas de todas clases,
Y aves y bestias diabólicas,
Dando a luz sus pimpollos,
Cada uno protegiendo los suyos.
Yakshas compitiendo por los retoños.
Y peleándose unos con los otros para comérselos.
Habiendo comido sus excrementos,
Sus pensamientos diabólicos
Se inflamaron más.
El sonido de sus reyertas,
Era terrible hasta el extremo.
Los fantasmas Kumbhandas
Se arrastraban sobre terrones de tierra
O algunas veces saltaban un pie o dos del suelo,
Mientras vagaban de un lugar a otro
Divirtiéndose en la forma que deseaban,
Agarrando perros por dos patas,
Y golpeándolos de forma que perdieran sus ladridos;
Torciéndoles las piernas alrededor del cuello,
Atemorizándolos para su propio placer.
Además había fantasmas
Con cuerpos muy altos y largos,
Desnudos, ennegrecidos y delgados,
Siempre viviendo dentro,
Y emitiendo sonidos estridentes y diabólicos,
Aullando en busca de comida.
También había fantasmas
Con gargantas como agujas;
Y otros con cabezas de bueyes
Que en ese momento comían carne humana
Y estaba devorándose los perros.
Estaban desgreñados
Y eran dañinos y crueles,
Oprimidos por el hambre y la sed
Ellos corrían por todas partes gritando y aullando.
Había Yakshas, fantasmas hambrientos,
Y toda clase de aves y bestias diabólicas,
Frenéticas con hambre, frente a las cuatro direcciones,
Atisbando a través de las ventanas.
Esos eran allí los problemas
Y los terrores más allá de toda medida.
Esta casa vieja y decadente
Pertenecía a un hombre
Que había salido de ella y estaba a una corta distancia,
Cuando al poco tiempo,
Las habitaciones traseras de ella
Cogieron fuego.
En un momento, todos los cuatro lados de la casa
Estaban rodeados de llamas intensas e incontrolables.
Las vigas, las columnas, los aleros y los cimientos
Temblaron y se abrieron con el sonido de una explosión,
Fragmentándose y cayendo,
A medida que las paredes interiores y exteriores, se desintegraban y
se desplomaban.
Todos los fantasmas y espíritus
Gritaban ruidosamente,
Mientras los halcones, buitres y otras aves,
Los Kumbhandas, y así sucesivamente,
Corrían de un lugar a otro en pánico,
Incapaces de salir de la casa por ellos mismos.
Bestias diabólicas e insectos venenosos
Se escondían en los huecos y en las rendijas,
Mientras los fantasmas Pishachas
También habitaban allí.
Con bendiciones y virtudes insuficientes,
Ellos estaban atrapados por el fuego;
Bebiendo sangre y comiendo carne
Y dañándose los unos a los otros.
Viendo que las hordas de Yeh Kan[13]
Ya estaban muertas,
Bestias diabólicas monstruosas
Competían para devorarlos,
Mientras vapores de humo hediondo
Penetraba todos los cuatro lados.
Ciempiés y milpiés
Y muchas clases variadas de serpientes venenosas
Peleando para escapar de sus escondrijos,
Se quemaban por el fuego.
Los fantasmas Kumbhandas
Los agarraban y se los comían.
Además, todos los fantasmas hambrientos,
Con las puntas de sus cabezas en llamas,
Atormentados por el hambre, la sed y el calor,
Corrían aterrorizados y angustiados.
Eso es lo que pasaba en esa casa:
Aterrorizados al extremo,
En peligro y conflagración—
No sólo con un problema, sino con una multitud ellos.
En ese momento el dueño de la casa
Estando parado afuera de la puerta
Escuchó a alguien decir:
“Todos ustedes muchachos
Hace un momento, jugando,
Entraron en esta casa.
Siendo jóvenes e ignorante,
Ellos se deleitaban en jugar y estaban apegados a sus diversiones”.
Habiendo oído esto, el anciano
Entró alarmado en la casa en llamas.
Tratando de salvarlos
De carbonizarse,
El les avisó
Acerca de la multitud de desastres:
“Los fantasmas diabólicos, los insectos venenosos
Y los combates que se estaban extendiendo,
La multitud de sufrimientos en sucesión
Que eran continuos y sin interrupción.
Las serpientes venenosas y las víboras
Y todos los Yakshas,
Los fantasmas Kumbhandas,
Los chacales y sus similares, los lobos, los zorros y los perros,
Los gavilanes, las águilas, los buitres, y las lechuzas,
Y las variedades de los ciempiés
Estaban frenéticos y aterrorizados hasta el extremo
Por el hambre y la sed.
¡Había muchos sufrimientos y problemas,
Incrementados enormemente por este gran fuego!
Pero todos los hijos, sin conocimiento, ignorantes,
Aunque habían oído los avisos de su padre,
Todavía se aferraban a sus entretenimientos
Y se divertían sin cesar.
En ese momento, el anciano
Pensó adicionalmente:
“Siendo así, mis hijos
Han añadido a mis preocupaciones más sufrimiento,
Ahora, en esta casa, no hay
Una sola cosa en la que podemos ser felices,
Y sin embargo, todos estos muchachos
Están intoxicados con sus juegos.
Por no prestarle atención a mis instrucciones,
Ellos se van a carbonizar en el fuego”.
En ese momento él pensó
En ingeniar algunos expedientes.
Él les dijo a sus hijos:
“Tengo toda clase
De juguetes preciosos:
Finos carruajes, enjoyados y maravillosos,
Carretillas de cabras, de ciervos y bueyes,
Que están ahora afuera de la puerta de la casa.
Así que, salgan todos
Porque tengo para ustedes
Esos carruajes y carretillas
Fabricadas a vuestro gusto
Para que puedan jugar con ellos”.
Cuando los muchachos escucharon lo que él estaba hablando
Acerca de los carros como esos,
Ellos inmediatamente corrieron agitadamente hacia fuera
A un lugar seguro
Donde estuvieron a salvo de ser quemados por el fuego.
El anciano, viendo que sus hijos
Habían escapado de la casa en llamas,
Y estaban parados al otro lado de la calle,
Se sentó en su trono de león
Y habiéndose regocijado dijo:
“iAhora estoy feliz!
Fue muy difícil traer al mundo
A esos muchachos y hacerlos crecer;
Necios, jóvenes y sin conocimiento,
Ellos entraron en esta peligrosa casa
Ardiente por los cuatro costados,
Colmada de insectos venenosos
Y temibles fantasmas Li y Mei,[14]
Pero todos ellos
Todavía se aferran a sus diversiones.
Ahora tengo que rescatarlos
Y salvarlos del desastre.
Por lo tanto, de todas las personas,
¡Yo soy el más feliz!
Entonces, todos los hijos,
Sabiendo que su padre estaba sentado felizmente,
Se dirigieron a él y le dijeron:
“Por favor, danos los tres carros enjoyados
Que nos has prometido cuando dijiste,
Que si tus hijos salían de la casa
Les darías tres carros
Como los que ellos querían.
Ahora el momento ha llegado,
¡Por favor, dánoslos!”
El anciano, teniendo una gran fortuna
Y almacenes conteniendo mucho
Oro, plata y lapislázuli,
Madre perlas y rubíes,
Usó estas cosas preciosas
Para fabricar varios carruajes magnificentes.
Ellos estaban adornados y decorados,
Rodeados de balaustres,
Con cordones dorados entrelazados en ellos,
Mallas con mostacillas de gemas
Esparcidas sobre ellos,
Y campanas colgantes en los cuatro lados.
Los carruajes tenían borlas de flores doradas
Colgando en todas partes,
Y ornamentos multicolores variados
Que los rodeaban.
Los cojines y las fundas blancas y pulcras,
Que estaban hechos de seda suave y algodón,
Y valorados en los miles de millones,
Estaban esparcidos arriba de los asientos.
Un gran buey blanco,
Regordete, fuerte y poderoso,
De apariencia fina,
Estaba enyugado a los carros preciosos.
Estos estaban rodeados por muchos hombres que iban a pie
Y que los servían y acompañaban.
Tales carruajes se les dieron igualmente
A todos los hijos.
Entonces todos los muchachos
Danzaron de felicidad;
Se montaron en los carros enjoyados
Y viajaron en las cuatro direcciones,
Divirtiéndose felizmente ellos mismos
En una comodidad sin obstrucciones.
Shariputra, te dijo
Que yo soy también así,
El honrado entre los muchos sabios,
El padre de los mundos.
Todos los seres vivientes
Son mis hijos,
Ellos, profundamente apegados a los placeres mundanos,
No tienen en absoluto, pensamientos inteligentes y prudentes.
En los Tres Dominios no hay paz;
Ellos son como una casa en llamas.
Llenos de muchos sufrimientos,
Y definitivamente temerosos.
Siempre presentes están las aflicciones
Del nacimiento, la vejez, la enfermedad y la muerte;
Fuegos como esos
Arden sin cesar.
El Así Venido ya ha dejado atrás
La casa de los Tres Dominios.
Calmadamente habito en quietud,
Y en paz en los bosques y los campos.
Y ahora es que los Tres Dominios
Me pertenecen enteramente,
Y en ellos todos los seres vivientes
Son mis hijos.
Sin embargo, ahora este lugar
Está lleno de calamidades,
Y yo soy el único
Capaz de rescatarlos.
Aunque los instruyo,
Ellos no creen o aceptan,
Por su profundo apego y egoísmo
A todos los deseos corruptos.
Usando los expedientes,
Les hablo de los Tres Vehículos,
Causándoles a todos los seres vivientes
Que entiendan el dolor de los Tres Dominios.
Revelo y proclamo extensamente
El camino que trasciende el mundo.
Todos estos hijos,
Si fijan sus mentes,
Pueden perfeccionar las Tres Claridades
Y los Seis Poderes Espirituales.
Algunos devendrán Iluminados-Condicionados, Y otros Bodhisattvas irreversibles.
- Shariputra,
Yo hablo esta parábola
Para los seres vivientes
Del Unico Vehículo.
Si todos ustedes son capaces
De creer y aceptar estas palabras,
En el futuro alcanzaran
El camino de Buda.
Este vehículo es sutil y maravilloso,
Puro y primordial.
En todos los mundos
Es el más supremo.
Los Budas se regocijan en él,
Y todos los seres vivientes
También deben alabarlo
Hacer ofrendas y reverénciense ante él.
Miles de millones ilimitados
De poderes y liberaciones,
Samadhis Dhyana y sabiduría
Y los otros Dharmas de los Budas
Se obtienen en un vehículo como este.
Yo causo que todos mis hijos,
Noche y día por muchos eones,
Por siempre se mantengan interesados
En montar este precioso vehículo
Que los lleva directamente al Camino,
En la compañía de los Bodhisattvas
Y la congregación de los Oyentes Correctos.
Por esas razones,
Aunque ellos busquen en las diez direcciones,
No hay otro vehículo,
Excepto los expedientes de los Budas.
Shariputra, te digo
Que todos ustedes
Son mis hijos,
Y yo soy vuestro padre.
Por muchos eones, ustedes
Se han quemado por muchas miserias,
Y yo les he salvado a todos,
Guiándolos fuera de los Tres Dominios.
Aunque más temprano dije
Que ustedes han pasado a la extinción,
Era sólo un final para el nacimiento y la muerte
Y no la extinción verdadera.
Lo que ahora deben alcanzar
Es nada más que la sabiduría de los Budas.
Si hay Bodhisattvas
En esta asamblea,
Ellos pueden, con una sola mente en atención plena, escuchar
El Dharma real y verdadero de Buda.
Aunque los Budas, los Honrados por el Mundo,
Emplean expedientes diestros,
Los seres vivientes que ellos transforman
Son todos Bodhisattvas.
Si hay algunos de poca sabiduría,
Apegados profundamente al amor y al deseo,
Por su beneficio
Les enseño la Verdad del Sufrimiento.
Entonces los seres vivientes se regocijan
Ganando lo que nunca han tenido antes,
Porque la enseñanza de Buda de la Verdad del Sufrimiento
Es verdadera, real y no es falsa.
Si hay seres vivientes
Que no conocen el origen del sufrimiento,
Que están apegados profundamente a la causa del sufrimiento,
Incapaces de dejarla incluso por un momento,
Por sus beneficios
Yo hablo apropiadamente del camino.
La causa de todo sufrimiento
Está enraizada en el deseo.
Si uno extingue el egoísmo y el deseo,
El sufrimiento no tiene donde descansar.
A la extinción de todo sufrimiento
Se le llama la Tercera Verdad.
Por el beneficio de la verdad de la extinción,
Uno cultiva el camino;
El dejar todas las conexiones de los sufrimientos
Se le llama ‘el logro de la liberación’.
¿De qué esas personas han sido liberadas?
A esa elemental separación de lo falso
Se le llama liberación.
En realidad ellos todavía
No han obtenido la liberación total.
El Buda dice que esas personas
No han alcanzado todavía verdaderamente la extinción,
Porque ellos todavía no han llegado
Al camino insuperable.
No es mi deseo
Guiarlos a la extinción[15].
Yo soy el rey del Dharma,
En armonía con todos los Dharmas.
Me manifiesto en este mundo
Para traerle paz y tranquilidad a los seres vivientes.
iShariputra!
Este sello mío del Dharma
Se habla, porque deseo
Beneficiar al mundo.
Por dondequiera que vayas,
No lo trasmitas incorrectamente.
Si hay quien lo oiga
Y se regocije en él, recibiéndolo
Encima de sus coronillas,
Debes saber que tales personas
Son Avaivartika[16].
Aquellos que creen y aceptan
El Dharma de este Sutra,
Esas personas ya han visto
Los Budas del pasado,
Les han hecho ofrendas reverentemente,
Y también han oído este Dharma.
Esos que son capaces
De creer lo que dices,
Ellos entonces me ven,
Y te ven también a ti,
Además ven la Bhikshusangha,
Como igualmente a todos los Bodhisattvas.
Este Sutra del Dharma de la flor
Se predica para esos de sabiduría profunda;
Cuando esos de entendimiento poco profundo lo oyen,
Confundidos y engañados, fracasan en entenderlo.
Todos los Oyentes Rectos
Y los Pratyeka Budas,
Encuentran los contenidos en este Sutra
Más allá de sus poderes.
Shariputra, tú has ganado
La entrada a este Sutra
A través de la fe.
Cuánto más podrían haberla ganado los otros Oyentes Rectos.
Esos Oyentes Rectos
Por su fe en las palabras de Buda,
Obedecen este Sutra
Pero el significado está más allá del alcance de su propia sabiduría.
Además, Shariputra,
Para el arrogante e indolente
Y para aquellos que consideran el punto de vista del ‘yo’,
No prediques este Sutra.
Las personas ordinarias de entendimiento poco profundo,
Arraigadas en extremo a los Cinco Deseos,
Al oírlo, fracasarán en entenderlo;
Tampoco se lo hables a ellos.
Si hay esos que no creen,
Y que difaman este Sutra,
Ellos haciendo esto, se separarán
De todas las semillas de la experiencia de Buda.
O si con insolencia,
Ellos abrigan las dudas y los engaños,
Tú debes escuchar ahora,
Lo que hablo de las retribuciones de sus ofensas:
Ya sea un Buda que está en el mundo,
O uno que ha entrado en extinción;
Si hay esos que disfaman
Un Sutra como éste,
Que viendo a otros leerlo o recitarlo,
Copiarlo o sostenerlo en alto,
Los ridiculizan, desprecian, odian y envidian,
Y abrigan resentimientos en contra de ellos,
En cuando a la retribución de su ofensa,
Escucha esto de nuevo ahora:
Esas personas al final de sus vidas
Entraran en el infierno de Avichi
Por un eón completo.
Cuando ese eón finalice, nacerán allí de nuevo,
En esa forma ellos rotaran
A través de incontables eones,
Cuando escapen de los infiernos,
Ellos tomaran los cuerpos de animales,
Tales como perros o chacales y sus similares,
Altos y flacos,
Negros, manchados, encostrados,
Y repulsivos a otros.
Además serán odiados y desdeñados
Por los seres humanos,
Siempre sufriendo de hambre y sed,
Sus huesos y carne estarán restringidos.
Durante sus vidas tendrán perforaciones de espinas venenosas;
Cuando mueran ellos serán enterrado bajo lapidas y piedras.
Ellos sufrirán esta retribución por su ofensa,
Porque han arrancado sus semillas Búdicas.
Pueden llegar a ser camellos
O nacer entre los burros,
Siempre llevando a cuesta cargas pesadas
Y golpeados con palos y látigos,
Pensando sólo en el agua y el pasto,
Sin conocer nada más.
Ellos sufren retribuciones como estas
Por difamar este Sutra.
Algunos pueden devenir chacales,
Entrando a las villas,
Con sus cuerpos cubiertos con sarna y llagas,
Y también sin un ojo,
Golpeados y apedreados
Por muchachos jóvenes,
Pasan toda una serie de dolores,
Inclusive hasta el punto de la muerte.
Habiendo muerto de esta forma
Ellos entonces renacen como serpientes inmensas,
Con cuerpos tan largos como quinientos Yojanas.
Sordos y estúpidos, sin pies,
Se arrastran en sus estómagos,
Aguijoneados y comidos por muchos insectos pequeños.
Pasando sufrimientos día y noche
Sin intervalo alguno,
Ellos sufren tal retribución
Por haber difamado este Sutra.
Si ellos devienen humanos,
Todas sus facultades estarán embotadas y disminuidas.
Ellos son obesos, feos, paralíticos y cojos,
Ciegos, sordos y jorobados.
Las personas no creerán
Cualquier cosa que puedan decir.
Ellos transpiran siempre pudrición,
Y serán poseídos por fantasmas.
Pobres e inferiores
Serán los sirvientes de otros.
Siempre enfermos y raquíticos,
Con nadie a quien acudir o responderle.
Aunque puedan estar cerca de otros,
Los otros nunca pensarán en ellos.
Si ganan alguna cosa
Ellos rápidamente la olvidan o la pierden.
Si estudian las formas de la medicina,
Siguiendo las prescripciones para curar enfermedades,
Ellos solamente harán que los otros se pongan peor;
Incluso hasta el punto de la muerte.
Si se enferman,
Nadie trata de salvarlos o curarlos.
Aunque tomen una medicina buena,
Eso sólo les aumentará sus dolores.
Si se unen a una rebelión,
Serán saqueados y robados.
Personas con tales ofensas,
Serán expuestos perversamente a tales desdichas.
Transgresores como esos nunca verán al Buda— El rey entre las congregaciones de santos,
Que habla el Dharma, enseña y transforma.
Pecadores como estos
Siempre nacerán en circunstancias difíciles.
Locos, sordos, con una mente confusa,
Nunca oirán el Dharma.
A través de eones, tan incontables
Como las arenas del Río Ganges,
Ellos nacerán sordos y mudos,
Con todas sus facultades incompletas,
Ellos siempre vivirán en los infiernos,
Vagando allí como si estuvieran en jardines placenteros,
O nacerán en otros caminos diabólicos,
Que tomaran como sus casas y hogares.
Entre camellos, burros, cerdos y perros—
Esos serán los lugares que caminarán.
Ellos pasarán esas retribuciones,
Por difamar este Sutra.
Si devienen humanos,
Serán sordos, ciegos y mudos,
Pobres y decrépitos,
No obstante se adornen ellos mismos con lo que sea.
Inflados de agua o deshidratados,
Con llegas y tumores,
Y otras enfermedades similares,
Ellos se cubrirán a sí mismos.
Sus cuerpos siempre apestaran
De inmundicia e impureza.
Profundamente apegados a los puntos de vista del ‘yo’,
Su odio siempre aumentará.
Abrazados con deseo sexual,
Ellos no son diferentes de las aves o las bestias.
Ellos sufrirán esa retribución
Por haber difamado este Sutra.
Te digo, Shariputra,
Si fuera hablar de las ofensas
De esos que difaman este Sutra,
No terminaría hasta el final de un eón.
Por esas razones,
Expresamente te digo,
No prediques o hables este Sutra
Entre aquellos que no tienen sabiduría.
Si hay esos con facultades devotas,
Y sabiduría que claramente comprende,
Con mucho aprendizaje y memoria fuerte,
Que buscan el camino de Buda,
A personas como estas
Puedes predicarle y hablarles este Sutra.
Si hay aquellos que han visto en el pasado
Cientos de miles de millones de Budas,
Que han plantado raíces sanas,
Que tienen mentes profundas y firmes,
A personas como estas
Puedes predicarle y hablarles este Sutra.
Si hay aquellos que son energéticos,
Siempre cultivando las mentes con la compasión,
Sin escatimar el cuerpo o la vida,
Para ellos puedes predicarlo o hablarlo.
Si hay aquellos que son reverentes,
Sin ningún otro pensamiento,
Que se han apartado de las personas cerradas y ordinarias,
Que habitan en soledad en las montañas y las marismas,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Además, Shariputra,
Si ves personas
Que se han apartado de consejeros ignorantes que predican el mal,
Y se acercan a los amigos buenos,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si ves discípulos de Buda,
Que sostienen los preceptos puramente,
Como joyas puras y brillantes,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si hay aquellos que no tienen odio
Que son correctos y gentiles,
Siempre compasivos con todos los seres,
Y reverentes de todos los Budas,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Asimismo, si hay discípulos de Buda,
Que en la gran asamblea
Con mentes claras y puras,
Usan varias condiciones causales,
Parábolas y frases,
Para hablar el Dharma sin obstrucción,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si hay Bhikshus,
Que por el beneficio de la sabiduría completa,
Buscan el Dharma en las cuatro direcciones,
Con las palmas unidas, recibiéndolo sobre la coronilla,
Que solamente se deleitan recibiendo y sosteniendo
El canon de los Sutras del Gran Vehículo,
Rehusando completamente aceptar
Una sola línea de otra escritura,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
Si hay aquellos que, con un objetivo en mente,
Buscan las sariras de Buda,
O que similarmente buscan los Sutras,
Y los alcanzan y sostienen sobre sus coronillas;
Esas personas que nunca jamás
Determinan buscar otros Sutras
Ni tienen nunca el pensamiento
De buscar las escrituras fuera del Camino,
Para personas como esas
Puedes hablarlo.
- Te digo Shariputra,
Si fuera hablar de las características
De esos que buscan el Camino de Buda,
Agotando eones, no terminaría nunca.
Personas como esas
Pueden creer y entender,
Y por su beneficio, tú debes predicar
El Dharma Maravilloso del Sutra de la Flor de Loto.
CAPÍTULO
TRES - El Sutra del Loto
NOTAS
11.Decimos: “Todos los seres vivos tienen la naturaleza de Buddha y todos pueden volverse Budd has”. Pero esto no es lo mismo que decir: “Los seres vivos son Buddhas”. No puedes volverte un Buddha sin cultivo. Debes cultivarte, meditar, y estudiar el Buddhadharma. Entonces puedes regresar a la raíz y volver a la fuente y volverte un Buddha. No puedes decir: “Los seres vivos son Buddhas. ¡No necesitamos cultivarnos!” Eso es solo conocimiento desviado y puntos de vista desviados. Debes cultivarte para volverte un Buddha.
12. El Señor Rey de los fantasmas de la Montaña de los Espíritus
observa los fantasmas surgir desde la esencia de la montaña, la tierra, las
piedras, los árboles y así sucesivamente. Tales fantasmas y otros fenómenos
extraños son conocidos colectivamente como Li Mei y Wang Liang.
13. Yeh Kan: Los
chacales y sus similares.
14. Fantasmas Li y Mei: Demonios Celestiales.
15. Extinción: Donde el término ‘extinción’ ocurre en la tradición
Budista, éste se refiere a la extinción de los sentimientos y percepción en el
estado especial de meditación alcanzado solamente por uno que ha logrado el
dominio de los 8 Dhyanas, y es un Anagamin (uno que no regresa) o un Arhat. Es
incorrecto usarlo en conexión con el estado de Nirvana, si es aplicado a uno
que ha logrado el Nirvana. Por lo tanto, el estado que se alcanza no es de ‘extinción’
o ‘aniquilación’ de toda la existencia; lo que ha sufrido la extinción
total, de acuerdo al punto de vista Budista, son las pasiones, la codicia, el
odio, y la ilusión o engaño que son las raíces de toda maldad y sufrimiento. Ling:
115 #1130 — Tomado de ‘The Seeker’s Glossary of Buddhism’. Ver
también Arhatship (cuatro etapas) — Arhat; más allá de la etapa de aprendizaje; Anagamin. Se refiere a los
cuatro niveles de Iluminación, culminando en Arhatship o el estado de Arhat.
Los Arhat ya no están sujetos al renacimiento en el Sámsara, o sea al ciclo de
Nacimiento y Muerte. Estos cuatro estados de Iluminación en el pasaje
Theravada, digamos, la etapa del que entra en la corriente (Srotapanna), él que
regresa-sólo-una-vez, él que no-regresa (Anagamin) y el Arhat.
16. Avaivartika o avinivartaniya: El
que comprende la equivalencia de la iluminación perfecta. Se dice del que entra
inmediatamente en el estado de establecerse definitivamente.
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